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Acuerdo de brujos

Me levanté con Alec abrazado a mi, intenté moverme sin despertarlo pero fue imposible.

- ya te vas - pregunta abriendo los ojos.
- debo ir con Magnus - explicó.
- desayúnelos juntos y luego vas con Magnus, anda - propone levantándose.
- no lo creo, no soy muy querida por este lugar, la única excepción son tus hermanos y Clary - recuerdo.
- no es verdad, además tendrán que acostumbrarse porque te verán mucho por este lugar - menciona.
- si insistes - me resigno.

Camine junto a Alec, ambos sosteníamos una bandeja con comida, hago una mueca cuando todos me miran.

- aun podemos ir a mi departamento - propongo incómoda.
- y perderme los panqueques, no lo haré - niega.

Caminamos hacia donde estaban Izzy, Clary y Jace, al vernos sonrieron Alec y ellos se saludaron alegremente.

- Alissa, que haces aquí - pregunta Jace sorprendido.
- bueno, Alec es bueno convenciéndome de hacer cosas que no me agradan mucho - respondo sonriente.
- esta de visita, solo hoy - explica Alec mirándome mal.

Volví a sentir la mirada de todos sobre mi, suspiro dejando mi vaso en la mesa.

- oye, no eres tú, es que no ven muchos brujos por aquí - menciona Alec.
- no me digas - comentó sarcástica.

Él solo se queda callado, miro mi comida, se me quito el hambre, sentí un dolor en el pecho, miro a Alec.

- tengo que irme - menciono levantándome.
- de que hablas, que pasa - pregunta.
- nada, me preocupa Magnus nada más - explicó y sin esperar respuesta me voy.

Despues de ir al departamento, Magnus y yo regresamos al instituto para ayudar con lo de los vampiros, vi a Maia entrar.

- disculpa, sabes donde está Alec - pregunto a un chico rubio.
- esta en las celdas hablando con los vampiros, pero nadie puede entrar ahí por ahora - responde secamente.
- qué te pasa, que yo sepa nunca te he dicho nada para que me trates así - pregunto enojada.
- el punto es que no creo que sea buena idea que te pasees por aquí como si fuera tu casa - responde cruzándose de brazos.
- porque soy bruja - cuestiono.
- no, personalmente me da igual, pero tenemos protocolos para esto - explica.
- no te preocupes, estoy aquí por Alec, no me gusta estar aquí más de lo necesario, estás pantallas me dan migraña - indicó.
- lo siento, olvidaba que solo estás aquí para estar con él - niega disculpándose - y oye, me alegro de que tú y Alec hayan podido resolver todo - menciona.
- disculpa - pregunto confundida.
- si, él me dijo que tenían algunas diferencias - explica.
- ah, te dijo verdad - repito.
- si - confirma.
- ya me voy - indicó y me alejo.

Magnus me mira burlón para luego ir a otro lado no se a qué.

Camino a la oficina de Alec y entró, él estaba ahí pensativo.

- hola - saluda al verme.
- hola, cómo te fue con los vampiros - pregunto sentándome junto a él.
- bien, como sabias que estaba ahí - pregunta confundido.
- bueno, tú guapo amigo me dijo - respondo.
- Underhill - pregunta mirándome.
- así que si lo convidarás guapo - cuestiono burlona.
- quizás, eso en un problema - comenta.
- no - niego - bueno tal vez, no se si me siento cómoda de que le cuentes nuestros problemas a todo el instituto - menciono.
- de que estás hablando - cuestiona.
- me dijo que le contaste que tuvimos problemas en nuestra relación - explicó.
- entonces, no puedo hablar con la gente sobre mis problemas - pregunta.
- bueno, si pero a él apenas lo conoces - señaló.
- es verdad yo, lo siento, no creí que fuera importante - se disculpa.
- lo se, solo que - hablo pero me interrumpe.
- espera, estás celosa - pregunta mirándome burlón.
- no me pongo celosa - niego mirándolo mal.
- estás celosa, de verdad sientes celos - dice sonriendo.
- nunca lograrás que me sienta celosa - aclaro.

Hasta el fuegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora