Not Strong Enough (Capitán América/Loki/Soldado de Invierno/Thor)

Capítulo 26: Noche de Pasión

No pude contestar. Steve no me lo permitía. Había sellado por completo cualquier entrada hacia mi boca en aquel beso tan apasionado pero a la vez tan posesivo. Entonces me tumbó en la cama, colocándose él encima de mi.  Se despegó un momento para quitarme los tacones y tirarlos a la otra esquina de la habitación.

--Steve, creo que--intenté decir. Pero él me interrumpió.

--Solo déjate llevar.--dijo volviendo a besarme.

No lo pude evitar. Steve me trasmitía tanto. Le correspondí el beso de una manera tan apasionada como la que me trasmitía él, a la vez que rodeaba su ancha espalda con mis brazos. Entonces metió su mano por debajo mía para bajar la cremallera de mi vestido y poder quitármelo. Con cuidado de romper lo menos posible el beso, salí de este y lo arrojé fuera de la cama. Los labios de Steve sabían a agua oxigenada pero en cierto modo me daba igual. Él empezó a bajar sus besos por mi cuello llegando hasta mi pecho. Desabrochó mi sujetador y empezó a lamer de una manera muy excitante mis senos, llegando hasta mi abdomen. Llegó hasta mis braguitas y para mis sorpresa las mordió y las rompió de un movimiento, echándolas fuera de la cama, dejándome desnuda. Bajé mis manos y desabroché su cinturón, para luego hacer lo mismo con su pantalón. Él se levanto un momento para quitárselo junto a sus zapatos. Cuando quedó en boxers se puso nuevamente sobre mi, llevando sus manos hasta mi trasero el cual empezó a acariciar. Yo en cambio adentré mi mano dentro de su boxer, empezando a jugar con su intimidad.

--Te amo.--dijo susurrando en mi oído.

--Yo también te amo.--le correspondí mientras bajaba sus boxers. 

Una vez fuera, apreté su miembro, haciendo que se pusiera duro del todo e introdujéndolo en mi. Él no pude evitar gemir, lo cual nada más en la primera embestida me trasmitió. Se sentía tan bien. Steve empezó bastante suave pero, a la vez que nuestras respiraciones se volvían más rápidas e irregulares, él iba aumentando de velocidad. Lo hacía tan bien. Siguió así más tiempo, no sabía cuanto. Un tiempo que disfruté muchísimo. Hasta que entonces noté como llegó al orgasmo, corriéndose dentro de mi.

--Te amo.--siguió susurrándome.-- No sé que haría sin ti.--me dijo mientras me abrazaba.

--Yo también te quiero.--dije acomodándome entre sus brazos.

Él sonrió.

--Descansa.--dijo dándome un beso en la frente.

Tardé poco en dormirme ya que tener relaciones me dejaba muy débil, más aún si era con Steve.

Pero aquella noche, mis sueños no me dejaron en paz. No paraba de ver a Thor, entregándome el colgante plateado con aquella piedra anaranjada incrustada en él. Aquella sonrisa que algún secreto me guardaba. Se me había olvidado por completo hablar con él, y mañana debía hacerlo.

Me desperté aún en los brazos de Steve. Cuando lo vi dormir, no quise despertarlo pero sino lo hacía llegaríamos tarde al desayuno. Le di pequeños besos por todo su rostro. Pero él no se despertaba, que raro... Entonces sus brazos se movieron rápidamente, haciendo que me dejara bajo él. 

--Me gusta despertarme tanto de esta manera.--dijo sonriente.

Entonces me besó con mucho pasión. A pesar de que era un beso mañanero, se sentía tan bien. Cuando se separó, miró el calendario. ¿Por qué lo haría? Entonces volvió la vista hacia mi.

--1 mes y una 3 semanas para que seas mía.--dijo, haciéndome recordar la promesa que le hice.

--Qué tonto eres.--dije riéndome y saliendo de debajo de él.

Nos vestimos y salimos a desayunar.

--Ve yendo tu. Yo tengo algo que coger de mi departamento.--me dijo Steve yéndose por otro pasillo.

Yo solo asentí y me dirigí hacia el comedor.