MY DARK LIGHT© #PGP2024

Capítulo 28

Despierto atrapada entre los brazos de Leec. He estado despierta por lo menos diez minutos, pensando en qué estrategia usar para no despertarlo. Quito el brazo que rodea mi cintura, cayendo por sobre mi espalda. Al estar con la mandíbula sobre mi cabeza, unos centímetros arriba de mí, su respiración golpea mi cabeza y aprovecho dar una vuelta que me termina sacando de la cama. Tras ponerme los zapatos, me detengo por unos milisegundos a mirar como duerme tan pacíficamente y salgo de la habitación dejando la puerta entreabierta. Giro por el pasillo para buscar la habitación de Handres y comprobar que nada le hubiera sucedido, luego de eso regresaría en silencio como si nada...

—¡Ay! —gime la enfermera con la que he chocado.

—Perdona, no quería...

—Celes Wright —saluda Sally con una sonrisa picarona—. ¿Cómo estás? ¿Ya te sientes mejor?

—Eh, sí. Algo. ¿Podrías...?

—¿Mi hermano también?

—¿T-tu hermano?

—Dile que salga de tu habitación quince minutos antes de las siete, el Dr. irá a revisarte. Tuve que hacer maravillas para que no entrara y los descubriera.

—Oh, pues... ¿Gracias?

—No sabía que estuvieran saliendo.

Ni yo. —Fue espontáneo.

—¿Espontáneo? Chewym lleva hablando meses de ti.

—¿En serio? —indago, semi-interesada de lo que le habría contado a su "hermana".

—Para ser honesta, nunca imaginé que lo fueran a hacer en el hospital. Espero que hayan limpiado todo.

—¿Hacerlo? No, no, no. Nada de eso. Sally, no pasó nada.

—Ay, vamos. Somos mujeres, podemos conversar si quieres. Handres y yo éramos unos...

—¡Handres! —la interrumpo a tiempo, no quería saber acerca de la vida sexual de mi hermano mayor—. Ya recordé porque salí, ¿podrías decirme en qué habitación está?

—101D, sigue de frente y la encontrarás.

—Gracias, oh y perdón por el golpe.

Ella sigue su camino y yo ando por el pasillo, contando las habitaciones hasta llegar. Abro la puerta, él está durmiendo con uno de los brazos fuera de la cama y con la boca semi-abierta. Compruebo el pulso en su cuello, el resultado que obtengo es mejor que la primera vez. Sé que está vivo, debería regresar y despertar a Leec pero no quiero moverme de este lugar ni alejarme de su lado. Lo que sucedió ayer no fue una amenaza, fue una declaración de guerra contra las personas que me importaban: que eran pocas, pero significativas para mí.

Éramos hermanos. Él es muy significativo para mí. Si Handres se despierta, me verá raro, así que no tengo más opción que irme y dejarlo dormir un poco más. El hospital es más tranquilo en la creciente madrugada, parece prohibido que ocurra un accidente a estas horas que afecte la tranquilidad del personal médico y los pacientes. Perdí la cuenta de cuántas veces estuve aquí.

Retorno a la habitación, roto la perilla lentamente para que no emita el molesto click y me meto en la cama, queda una hora hasta despertarlo y hacerlo marchar. Leec ha cambiado de posición, generándome la duda de que ya ha despertado y se está haciendo el dormido.

Duerme con la cabeza debajo de sus dos manos, como yo suelo hacer. Lo imito como una sombra, la diferencia reside en que conservo una mano fuera para acomodar el cabello que le ha caído en la frente y que me impide verlo.

Odiaba a Chewym, no hace mucho. Ahora resulta que no puedo quitarle la mirada de encima. Aunque no es Chewym al 100%, su cuerpo es utilizado por otro. Resulta curioso como mis sentimientos avivaron mi curiosidad respecto a él, estoy experimentando algo nuevo y singular. Generado por lo que ahora sé.