¡¡¡GUERRA!!!

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Marina ya no podía aguantar el dolor que sentía, en su vientre bajo. Las contracciones cada vez se hacían más fuertes.
A los niños los llevaban igual que unos criminales, con las manos en la espalda, cabeza agachada y soldados donde avanzar. Parker con el pánico a todo dar, por su cabeza pasaban Miles de estrategias para poder derrotar a  los cientos de na’vis que se encontraban afuera.

Minutos antes de llegar a la base…

NARRA NETEYAM:

-¿Por qué no me habías contado que eras novia de luna?- le pregunto a mi hermana mientras nos bajamos de nuestros ikranes.

El pueblo entero está en silencio, nadie fuera de sus hogares.

-perdón pero era un acuerdo mutuo entre ella y yo, imagínate se hubiera enterado antes ese viejo-me responde tuk media molesta. Se nota que aún trae el enojo por el padre de ke’nay- quizás nadie la hubiera contado.

-tienes razón.

-neteyam- me llama Aonung, mientras viene con ke’nay – Michel nos acaba de decir que se llevaron a los nos y a nuestras esposas también.

-¿Quiénes?

-al parecer son esos soldados- me responde ke’nay.

-tenemos que ir.
-reuniré a todos los hombres del clan- se va Aonung.

Mientras todos se preparaban yo buscaba mis armas, y las de Aitana también sabía que aún estando embarazada las utilizaría.

Tomamos nuestros animales y fuimos a la dirección que nos dijo Michel. Antes de partir, le pedí a Tom que me diera armas humanas, pistolas y granadas.
Unos metros antes de llegar nos fuimos en silencio, para que nadie detectará nuestro movimientos. Tenía algunos soldador afuera haciendo guardias pero no tantos. Con la pistola con silenciador le dispare a los guardias, mientras los guerreros rodeaban la base en silenció.

-ahora- me susurra Aonung.

Saco las granadas me acerco, les saco el seguro y las tiro, para llamar la atención del enemigo.

NARRADOR OMNISCIENTE:

-señor estamos rodeador- decía un soldado mirando las cámaras preocupado.

-les dije que atacarían- dice el científico, ese científico en práctica.

-¿ese es papá?- ki’on mira a la pantalla, dónde no solo se ve su padre, si no también, los demás na’vis que venían a la ayuda.

-wow, y yo que lo creía anticuado – se impresiona tsu’rey.

…..

- Hermana aguanta un poco más – Emma y Aitana intentan calmar a marina quien tenía las contracciones más fuertes. No le había pasado con ninguno de sus anteriores embarazos.

- Siento.. que me voy …a morir-  se le entre cortaba voz a marina por el dolor.


- Pero ustedes dos son tsahik, ¿No deberían saber cómo funciona o que hacer?- le pregunta Aitana.

- Si, pero…AAAA- los dolores ya no dejaban hablar a marina. De todos los hijos que había tenido este era el que más le había dolido.


- ¿Desde hace cuánto estás con estos dolores? – Emma comienza a mirar a  marina. No podía tocarla ni nada, porque las tres estaban atadas.

- Desde la playa cuando fui con Tommy.


- Mierda – Emma se comenzó preocupar.

Marina comenzó llorar en silencio. Tenía un mal presentimiento.

- Hermanas – les dijo marina llamando la atención de ambas- ustedes…saben que yo las amo muchísimo- se le entrecortaba la voz por el dolor- díganle a mis niños que los amo más que nada en el mundo y que sean fuertes…díganle los mismo a mis sobrinos- Aitana y Emma comenzaron a preocuparse, eso parecía una despedida y vieron como marina perdía color de a poco- y a…Aonung -marina con las pocas fuerzas que le quedaban, sonrió recordando a su marido- díganle que lo amo tanto, tanto, con todo mi corazón, que gracias por todo y que cuide a mis niños y al que tengo en mi vientre- el cuerpo de marina se relajó.

- No, no,no- emma miraba a marina- hermana no.
Aitana y Emma comenzaron a llorar.

- Hay madre mía no lo hagas- gritaba a Aitana.

- Tenemos que intentar salir.

……
- Padre llegaste- Aonung sonríe al ver a tonowari.

- No podíamos faltar, adentro están mis nietos y nuera.

- Lo mismo digo- aparece Jake.

- Vamos, la parte de atrás está libre- los busca neteyam y fueron todos.

Comenzaron a avanzar y matando a quien se interpusiera en su camino. Cómo todos estaban atacando por la parte delantera, le quitaron importancia por donde ellos estaban entrando.

…..

- ¿Qué creen que hacen?- ne’ya miraba a los mayores del grupo.
- Shh- le dice Noah
Da’ley intentaba robarle el arma al guardia que los estaba cuidando.

- Hey niño, ¿Qué crees que haces?- el guardia ve lo que intentaba hacer.
- Yo…-daley se pone nervioso. Pero se le quitaron cuando vio al guardia caer desmayado en el suelo Y vio la puerta abrirse dejándolos libres

- Salgan- le dice Marcus, el científico en práctica.
Entre todos se miraron confusos, pero Pero salieron.

- Tomen – Marcus a cada uno le comenzó a dar un arma - ¿Saben cómo manejarlo verdad?
Los niños entre si se miraron confusos.

- No- dice tsutey.

- Está bien, tengan- les pasa arcos y armas que si saben manejar.

- Ahora sí- se emociona ne’tak.

Salieron y con cuidado comenzaron a avanzar por los pasillos casi vacíos. Con la intención de buscar a las madres de los muchachos.

- Quietos- escuchan una voz detrás de ellos.
Los mellizos y mellizas se voltearon.

- ¿Abuelo?- ellos se emocionan. Ya que no sabían que el estaría allí.

- Ay dios – los cinco se abrazan emocionados por el reencuentro.

- ¿Dónde están ellas?- pregunta ke’nay.

- Estamos cerca – interrumpe marcus- síganme.

Comenzaron a avanzar hasta llegar a una sala que estaba cerrada. Marcus intentaba abrirla con el peso de su cuerpo.

- Ay no puedo- Marcus se cansó.

- Permiso- aonung pasa y abre la puerta.

Lógica Marcus es humano y chiquito, los na’vis gigantes y fuertes.

- Llegaron- dice emma triste y ya sin ganas de hablar.
Aonung al entrar quedó horrorizado.

- No, amor – Aonung fue directo donde marina.

Tonowari y Jake al ver esto sacaron a los niños del lugar.

- Responde amor porfavor – Aonung aún le quedaban esperanzas que ella le dijera algo, mientras neteyam lo ayudaba y desata a marina.

- Aitana, váyanse con marina y revísala- les dice emma.

Todos comenzaron a salir con cuidado. Aonung lleva en brazos a marina, al salir de la base los hijos de estos dos se asustaron.

- Mi mamá – Ares se asusta y comienza a llorar. Ronal lo toma en brazos para consultarlo “ella estará bien” le susurra ella al pequeño.

Con ayuda de subieron los tres al ikran de Aitana.
La guerra se había desatado, iba muy fuerte.

Algunos del clan estaban heridos pero no de gravedad. De a poco entre los na’vis se fueron enterando lo que le había pasado a la tsahik del pueblo.
….

- Elizabeth ayuda- entran los recién tres llegados al Mauri de marina. Quien estaba Elizabeth cuidando a luna.

- Mierda- asustadas y con el corazón acelerado comenzaron a intentar estabilizar a marina.

Aonung tenía muchas ganas de vomitar y decidió esperar afuera. Rezándole a eywa que no fuera hora que se llevará a su hija, aún tenían mucho que vivir juntos, su historia no podía acabar ahí y lo peor, es que no tendría una segunda parte. Ella era su pedestal y no solo para él, si no para sus hijos también. De acodarse que la primera vez que se vieron se agarraron a golpes, luego fueron cómplices, luego novios, esposos y ahora padres y jefes, deseando en un futuro ser abuelo.

……

La guerra había terminado, dejando en claro otra vez que los na’vis ganaban y son invencibles. Todos esperanzados a esperas buenas noticias sobre la tsahik.
Los niños en cuento llegaron fueron corriendo donde se encontraba su madre.

- ¿y mamá?-pregunta iris.

Los demás también llegaron. Aonung agachó las orejas y las lágrimas comenzaron a brotar de nuevo.





































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