Suspiros de Lamentos.

Capítulo 15.

Mok Seok y Xi Hua no se hablaban en absoluto, el menor estaba sumamente molesto con su hermano mayor al enterarse que había perdonado la infidelidad de Mikhail, pero a la vez sabía mejor que nadie que no era obligación del contrario escuchar sus consejos, después de todo, era consciente de que si él hubiese estado en su posición ni siquiera habría cuestionado nada, hubiese perdonado en ese mismo instante a su novio y se culparía por haberlo llevado a serle infiel.

Adicionalmente, las clases en la universidad eran difícil de seguirle el ritmo, al menos en la parte de sociabilizar con sus compañeros, estaba agradecido de que François le hubiera hablado el día de la charla, prácticamente pasaba todos los días con él y cuando este faltaba, se dedicaba a mensajearse con su novio todo el día.

─ ¿En qué estás pensando? ─preguntó el chico de cabello cano a la vez que se sentaba junto a Mok Seok, quien había estado dibujando en piloto automático durante la ventana de una hora.

─ ¿Umm? En mi hermano... Perdonó a Mik y probablemente haya quedado en cinta de nuevo y en que me duele la vista y que quiero ver a mi esposo... ─admitió sintiendo como sus mejillas se ruborizaban por la manera que había llamado a su novio, aunque en realidad no era mentira, después de todo se habían casado aun estando en el viaje a Corea del Sur cuando aun estaban en la escuela.

─ ¿Esposo? Creí que era tu novio solamente... ─murmuró sorprendido el francés.

─ Nos casamos a escondidas en Corea del Sur, bueno en realidad solo hicimos la ceremonia porque allá no nos iban a dejar casarnos y mis abuelos no lo soportan... Y mis padres en realidad tampoco es como si estuvieran muy felices que sus dos hijos estén con dos chicos rusos de personalidades opuestas... Por cierto, ¿qué clase nos toca ahora? Quiero que acabe luego, quiero ir a casa y ver mi serie de anime favorita... ─se quejó haciendo reír al contrario y a una persona que se había colado en el campus para verlo.

─ Por un segundo pensé que dirías que era porque querías ver a tu esposo. ─dijo una voz riendo por lo bajo detrás de ambos chicos.

─ ¡LY! ─gritó el menor sorprendido antes de simplemente saltar a los brazos de Lyon, quien sin decir nada, solo lo tomó del mentón y lo besó con delicadeza─. ¿Qué haces aquí? Creí que tenías clases...

─ Pues nuestro profesor canceló la clase porque su hija tuvo un pequeño accidente, así que pensé en darte una sorpresa... Por cierto, François muchas gracias por cuidar de Kukki ─dijo antes de estrechar la mano de aquel chico.

─ Oye, bastardo me dejaste sola... ─murmuró una chica antes de darle un golpe en el brazo a Lyonel─. Oww, ¿él es tu omega? Es mucho más lindo de lo que me imaginé ─murmuró la muchacha apartando de un empujón a Lyon del lado de Mok Seok─. Lo siento, mi nombre es Alice, soy amiga y compañera de clases de este tarado, lo conozco desde hace años, ya que también soy su compañera de patinaje sobre hielo, así que no te preocupes que yo te lo cuido en la facultad y antes de que siquiera pienses algo raro, entre nosotros no hay nada, no me gusta y ni siquiera llega a rozar a mis gustos, de hecho, creo que tu amigo es más mi tipo que este idiota sobre desarrollado.

Lyon no pudo evitar golpearse la frente con la palma de su mano, sabía que Alice estaba más que emocionada por conocer a Mok Seok, pero olvidó lo intensa y parlanchina que podía ser cuando estaba nerviosa o ansiosa, pero dejó escapar un suspiro de alivio al notar que su omega solo se había reído y saludado a la chica con una radiante sonrisa en los labios.

─ No seas tan intensa, estás haciendo el ridícu... ¿Kukki, ¿qué te ocurrió en los ojos? ─preguntó preocupado al notar que los ojos de su novio se veían algo hinchados y rojos.

─ ¿Hum? ¿Está muy mal?...

─ No hace mucho me dijo que le dolía la vista... ─murmuró Fran preocupado─. Se ve bastante feo como están... Quizás sea mejor que vaya a la enfermería para que lo atiendan, yo le avisaré a los profesores.