Cold Hands ;; Hyunlix

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Los días pasaron y el contacto volvió a ser casi nulo, los menores de cada reino hablaban con gran constancia mientras tuvieran tiempo libre, pero los mayores eran tan diferentes, podías mandarles mensajes que con suerte los revisarían, y era precisamente eso de lo que se quejaban los pequeños.

— Es que nunca responden, ayer le mandé un mensaje a Hyunjin para que viniera y hablar porque ES MI HERMANO y me gusta hablar con él, ¿¿sabes?? Pero estuvo CINCO HORAS para responderme. — Se quejó Yeji mientras iba dando vueltas por su habitación con el móvil en la mano, iba mirando por si Felix decía algo, ya que solían hacer videollamadas para que este pudiera hablar de una forma más cómoda incluso para ambos.

"— Minho también es así, aunque suele estar atento si soy yo quien le escribe... —" Habló Felix mediante simples símbolos con las manos y se quedó atento por si su amiga no había entendido algo de lo que dijo, aunque no fue así y lo pudo notar cuando soltaba un fuerte quejido y se tiraba en la cama.

— Ayyy Lixxie, es que mi hermano deberías haber sido tú, no HWANG HYUNJIN. Es que es tan... — Una voz masculina interrumpió la charla. Yeji pegó un grito de molestia mientras el otro se iba acercando a ella, despeinándola una vez estuvo suficientemente cerca.

EUn ratito después de que Hyunjin hubiera entrado en la habitación para molestar a su hermana, saludó a Felix y se quedaron los tres hablando, justo como si hace unos instantes no pareciera que los Hwang fueran a dejarse calvos el uno al otro. La conversación era fluida, siempre lo fue entre ellos, independientemente de cuántos estuvieran hablando, nunca tuvieron problema para comunicarse y contarse cualquier tipo de cosa.

— ¿Vendrás a la fiesta, Lix? Es esta noche — Habló Hyunjin y se quedó mirando el móvil mientras tenía esperanza de que este le dijera que sí, no sabía por qué, pero quería verlo.

Felix asintió con la cabeza y los tres se quedaron de cómo se encontrarían, aunque Lee siquiera prestaba mucha atención, solo pensaba en cómo haría para ir, porque el otro día pidió permiso y le dijeron que no, pero ya no era un niño pequeño, ¿verdad? Ahora era mayor, podía decidir por si mismo.

En cuanto colgaron, Felix fue directo a la habitación de su hermano mayor, a ver si conseguía convencerlo de que lo llevara a la fiesta, pues él sí tenía licencia para conducir y sería su única opción aparte de ir caminando y que todos en el reino se enteraran, incluyendo sus padres.

— ... Minho — El menor habló justo después de entrar en la habitación y se acercó a su hermano, el cual lo miraba fijamente en silencio, pero sorprendido a su vez, si bien sabía que su hermano no era mudo, se había acostumbrado a pensarlo como tal y se le hacía extraño escucharlo. Tragó saliva y se fue a sentar junto él, notando cómo tenía toda su atención. "— ¿Me podrías llevar a la fiesta de los Hwang? Quiero ir pero papá me dijo que no, y no tengo quien me lleve —" Esta vez ya habló como usualmente hacía, moviendo las manos.

— ¿Y yo qué gano? — El silencio inundó la habitación y los ojos de ambos hermanos conectaron, uno pensaba y el otro simplemente esperaba. No estuvieron mucho tiempo así, a Felix no se le ocurrió nada y simplemente puso una cara triste, recibiendo una pequeña risa y asentimiento de parte de su hermano, abrazándolo cómo agradecimiento antes de irse a su habitación a prepararse.

Un par de horas pasaron y Minho se encontraba en la habitación de Felix mientras lo ayudaba para que se decidiera qué ropa ponerse. El mayor no tuvo mucho problema en elegir para sí mismo; algo sencillo, elegante y costoso, quería hacerse notar y que supiera que era el príncipe mayor de la familia Lee pero tampoco quería destacar completamente, y por otro lado estaba el menor... Tanto camisas como pantalones eran sacados del vestidor y tirados al suelo, arrugándolos e incluso pisándolos a medida que se iba paseando por el gran vestidor del pequeño.