La única persona que no miró raro a Sergio fue su esposa, a quien anteriormente ya le había contado de la situación y pedido su opinión además de decirle todo lo que había hablado con Calderón, ella no se pudo negar a ayudar a la joven y menos después de verla riendo brillante junto a su esposo quien parecía que iba a soltar un pulmón de la risa después de su atraco, verlos era fascinante y supo que no solo ella tuvo ese sentimiento pues varías personas habían enmarcado una cálida sonrisa con solo verlos, no entendía la sensación de su pecho pero sabía que no quería alegarlos, capaz era simplemente que Victoria resultaba ser una persona con un aura casi divina, quién sabe, lo que sí es que cuando volteo a ver hacia la penetrante mirada que sentía sobre ellos vio algo que no le gustó.
Celos, posesividad, obsesión, orgullo, eso y más era Max Verstappen, mas parecía que concentró todo ese lado negativo de su ser en esa mirada, ella no le daba razón a ese hecho, él no conocía a la pelirroja y sabía que tampoco es que estuviera enamorado de Sergio aunque a veces los de marketing quieran verlo así, entonces, ¿Por qué?.
-Caro te presento a Victoria, Victoria te presento a Carola seguro ya sabes quién es, ya me tengo que ir- Solo esas palabras de su esposo frente a ella lograron sacarla de sus pensamientos y cuestionamientos, miró más de cerca a la menor y notó una belleza que pasaba de los estándares normales, no era una supermodelo, pero era simplemente hermosa como un hada, y esa hada le sonreía cálidamente mientras le ofrecía su mano y le decía un "Es un gusto Carola en serio perdón por las molestias".
-No te preocupes, Sergio ya me contó todo, no pasa nada verás que saldrás de esta, nadie te va a tocar de nuevo- Y lo sabía porque cuando su marido prometía algo lo cumplía, bueno la única promesa que nunca logrará cumplir es la que ella siempre estuvo consciente. Sus palabras fueron contestadas con un muchas gracias, un gracias tan sincero que sonaba como el de un mendigo cuando le dabas un pedazo de pan, se sintió bien de poder ayudarla, pero su pecho se estrujo y su garganta tuvo un nudo que quiso evitar carraspeando un poco y mirando hacia donde estaban sus hijos.
-Bueno ya nos presentamos, yo creo que te gustaría conocer a los niños- Dijo para cambiar el tema y también porque veía la mirada curiosa y alegré de los pequeños viendo a la universitaria.
-Claro, tengo unos dulces que me acabó de ganar, ¿le puedo dar uno a cada uno? - Oh era un ángel, quería darle dulces a los niños, pero primero le preguntó a ella para saber si estaba permitido en el estilo de vida que ellos llevaban, aparte de que se ofrecía darle uno solo a cada uno para que fuera igual para cada uno y no hubiera diferencia de cantidad de dulces por edad o tamaño, cosa que causaría un problema entre ellos. Parecía que Victoria pensaba más allá de la situación o las cosas del momento, eso era impresionante, pero podía llegar a ser cansado mentalmente y eso no se podía evitar.
-Por supuesto así te van a amarte, solo que preparate para que las próximas veces que te vean te pidan su cuota de dulces- Se río ante la idea de sus hijos casi saltando sobre la pelirroja pidiéndole dulces, era una imagen encantadora.
-Tendré que hacerle escondites de dulces a mi ropa para siempre traer unos, quien sabe qué me puedan hacer si no se los dio- Se río igual se sentía aceptada por Carola y entendió que ella la apoyaría por lo cual entro en confianza rápidamente.
Durante las Qually 1 y 2 la verdad es que no prestaron gran atención a la pista, se la pasaron hablando con el padre de Sergio mientras que Victoria igual jugaba con los niños quienes confirmaron las palabras de Carola pues ya hasta llamaban hermana mayor a Vic, todo por idea de Carola.
Obviamente la joven tuvo que quitarse por lo menos su gorra de Ferrari para no llamar tanto la atención entre tanto azul y Red Bull por todas partes, después de quitarse la gorra la guardo en su bolsa que también era de la escudería enemiga a su pesar, y la dejó en una esquina que Carola le señalo como segura para que no se tuviera que mover del lugar, posteriormente se soltó el cabello de la cola de caballo que traía, liberando sus rizos para que bailaran libres cuando se movía. Por suerte Checo estaba liderando las primeras clasificaciones emocionando a todos en los boxes y más a toda la afición del recinto que aclamaba su nombre como si fuera el himno nacional, era una situación simplemente esplendida una de esas que no se viven dos veces en la vida.
Pero la tragedia sucedió cuando uno de los mecánicos llamó a Victoria para darle una camisa del equipo, ella fue emocionada pues desde hace rato le habían comentado que le darían una para que pudiera cambiarse de ropa, ya que es evidente que utilizar merchandise de otro equipo es una alta traición, pero resulta que no encontraban una que se ajustará lo suficiente a su corto tamaño de tronco, pero con un pecho decente, cuando por fin la encontraron fue cuando la llamaron al lado donde estaba el box de Verstappen que ni había que caminar casi, cuando cruza la línea divisora de ambos boxes, a segundos de que se acabará la Q3 Verstappen marcó purpura en el sector 1, cuando le dieron la camiseta, Verstappen logró igual marcar otro sector en púrpura, y justo cuando se colocó la prenda encima de la otra fue cuando Verstappen cruzó la línea de meta logrando la Pole.
También fue cuando ella se dio cuenta que esa playera era team Max pero es que no habían encontrado otra que le quedara.
Carola no pudo evitar notar todo esto, seguro era una mera coincidencia, no podía ser cierto que solo porque la menor cruzo unos cm a otro box ahora a Checo no le haya ido tan bien, tampoco podía ser posible que cuando se quito la gorra de Carlos este perdiera justo una décima con su compañero de equipo, ella no podía ser nada de eso, no era lógico, ni científico, ni nada, simplemente no podía ser.
Pero algo era seguro, no la iba a alejar de Checo, por más que sintiera que ella era un peligro para su relación, sabía que la joven era algo más, era algo que definiría muchas cosas, era el cambio en la vida de varios y esperaba que fuera para bien, así que con todo el miedo y tranquilidad del mundo le abrió la puerta para que estuviera con ellos, tal vez eso también a ella misma le ayudaría.
En esta historia no alterare muchos datos, quiero que este lo más cercana a la realidad, pero algunos datos los cambiaré ligeramente como resultados de clasificación o prácticas, igual por ejemplo en esta historia Carola no está embarazada de su cuarto bebé, todo para mayor facilidad en ciertos temas.
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Solo es cuestión del destino
Roman pour AdolescentsElla no era para nada especial, si le preguntaban ¿qué tan bella se sentía?, simplemente les respondía "sé que tengo una bonita cara pero nada fuera de lo normal". Solo era un poco más bonita que el promedio a su alrededor, nada más, no tenía nada m...