"Tell me it's alright, give me the green light"
Febrero, 2012
Michael miró a su mejor amigo por lo que a él le pareció la vez número cien. Si bien había dicho algunas veces una pequeña parte de su problema no tenía idea de cómo abordarlo completamente, tenía miedo de cómo él iría a reaccionar, si se asustaría o se enojaría. En tal caso Michael podría prescindir de eso, prefería mantener su amistad que calmar su alocada curiosidad. Pero a la vez su mejor amigo era la única persona en la que confiaba para semejante situación.
—Luke—llamó.
—Mmh—respondió el chico rubio sin prestar atención real a su amigo teñido. Ambos estaban jugando al FIFA y aunque Michael era el que siempre ganaba, a Luke le encantaba jugarlo una y otra vez.
Michael arrugó la boca un poco con frustración. Quería que Luke lo escuchara y a la vez le parecía más sencillo si no estaba ahí exactamente.
—¿Recuerdas el otro día—comenzó mientras quitaba en la pantalla la pelota de uno de los jugadores de Luke-cuando estábamos viendo The one?
Michael observó a su rubio mejor amigo otra vez, éste estaba pasando la lengua por sus labios, concentrado en la pantalla, o eso pensaba Michael ya que luego de unos segundos habló.
—Si, estuviste toda una semana molestando para verla.
Michael asintió con algo de pena, no quería verse desesperado. Aunque lo estuviera.
—¿Recuerdas que cuando se besaron yo te pregunté cómo se sentía besar a otro chico?
—Si—respondió aún sin mirarlo. El rubio se encontraba bastante emocionado porque por primera vez estaba siendo altamente superior que Michael en el FIFA.
—Y respondiste que no lo...
—Ve al punto—lo interrumpió Luke, no notando la incomodidad de su mejor amigo.
Michael se rascó la nuca y decidió que, conociendo a Luke, sería más fácil ser directo y con poco tacto (la forma en la que el rubio estaba acostumbrado a que el teñido lo tratara).
—Tu... ¿qué te parece si lo descubrimos juntos?—soltó Michael al mismo tiempo en que su arquero no lograba atrapar la pelota que un jugador de Luke había lanzado virtualmente.
—¿Qué?—la voz de Luke salió unos tonos más agudo de lo normal. Miraba anonadado a su mejor amigo y no se había dado cuenta, o no le importaba, haber hecho un gol.
Michael vio el rechazo avecinándose.
—Quiero decir, no quiero decir que me gustes—se excusó—. Es que tengo mucha curiosidad y eres mi mejor amigo, no creo tener el valor de preguntar a alguien más sobre esto. Nada tiene que cambiar después, podemos seguir igual que ahora, está bien. No estoy diciendo que quiera que sea diferente. No tenemos que hacerlo si no quieres, podemos...
—Está bien.
Michael se quedó en silencio sin asimilar lo que su amigo había dicho. Luke había puesto Pausa en el juego en algún momento de su entreverado monólogo y ahora lo miraba con tranquilidad, sus pies cruzados al estilo indio.
Lo que Michael menos entendía era porqué su amigo lucía como si eso fuera algo de todos los días, común y corriente. Luke tenía novia hacía ya un año y unos meses, nunca se había mostrado interesado en nadie más, mucho menos en chicos, mucho menos en Michael. Pero allí estaba, sentado a su lado, mirándolo con calma y dispuesto a darle un beso.
Pero Michael pensaba que no contaba como un engaño a su novia. Solo era un favor de amigos, además se trataba de Michael, no eran amigos desde siempre pero habían entablado una muy bonita amistad.
—¿Por qué?—preguntó Michael con cautela.
Luke se encogió de hombros.
—¿Por qué no?
—No te estoy obligando—aclaró.
—Lo sé, pero no quiero que vayas a buscar a alguien más para esto.
Michael asintió mientras respiraba hondo. Vio que Luke estaba quieto así que se dio cuenta de que debía adelantarse él. Vamos, no seas marica, se dijo irónicamente Michael, solo vas a besar a tu mejor amigo. Finalmente se movió hacia su amigo, acercó su mano primero y encajó sus dedos en el hueco encima de las clavículas de Luke.
No sabía qué era lo que estaba haciendo pero todo le parecía incomprensible desde el principio así que solo se dejó llevar. La piel de Luke bajo sus dedos (expuesta gracias al calor de Febrero y la ropa pequeña) estaba tibia a su tacto, incluso cuando presionó un poco más fuerte contrastó con los dedos fríos de él. Sin mirar a su amigo a los ojos se acercó hasta que sus narices estaban apoyadas en la del otro, pestañeó con extrañeza y finalmente puso sus labios sobre el otro chico.
Michael casi se arrepintió al instante. No porque fuera algo muy malo sino porque no estaba seguro de encontrarse emocionalmente preparado. Tal vez estaba pensando cualquier estupidez, porque los labios de chicas y chicos no se diferencian en casi nada, sin embargo a Michael le causó una sensación muy diferente a cuando se había besado con chicas.
En algún momento sus lenguas habían comenzado a formar parte de su beso. Michael se encontraba más que extasiado, su mano -la que no estaba hundiendo sus dedos en la clavícula de Luke- lo tenía al rubio presionado desde la nuca, como prohibiéndole la idea de alejarse de sus labios. Sentía una tibieza en su muslo izquierdo, allí donde Luke tenía apoyada su mano, ya que el teñido estaba sentado sobre sus propios talones. Apretaba con sus dedos el muslo del chico y cada vez lo hacía más fuerte y con más frecuencia.
Lo siguiente que sintió Michael fue que un pitufo le pateaba las pelotas. No supo describirlo de otra manera pues el dolor que sentía en la ingle no era demasiado fuerte, ni siquiera era exactamente dolor. Fue por eso que decidió apartarse. El beso terminó lento y en un sonoro chasquido, como si el rubio no hubiera querido terminar con el contacto.
—Bueno...—murmuró Michael. Ninguno miraba al otro y parecía que el clima había aumentado a mil grados
—Bien, ¿no?—dijo Luke, acomodándose el pelo que le caía por la frente.
—Sí, sí. Eh... ¿gracias?
—Claro. No hay problema.
Luke buscó el mando para poder seguir jugando y Michael se preguntó cómo era que el rubio estaba tan tranquilo, y si no lo estaba, cómo hacía para aparentarlo. Porque Michael estaba de cualquier modo, cualquiera, menos tranquilo.
—¿Seguimos?-preguntó Luke, alcanzándole el mando.
Michael no pudo evitar fijarse que en la fina clavícula de Luke había dejado cuatro pequeñas marcas de uñas.
__________________
I'm here babe
I know what you want babe
Just let me hold you close babe
And make you feel alive
Qué inspiración me dio.
Quiero decirles que esta short story la vengo pensando desde mitad del año pasado.
Son las 12:09 am en Uruguay así que al menos para mí empezó Julio.
Por cierto, hace un año de Amnesia... Cause I'm not fine at all.
Gracias por leer ♡ Vayan a iCarly.com ah, qué?
-Abby
