Zombies - El tapiz del infierno (JINX)

Episodio 3

Para eso había esperado más de lo requerido? Para que ese medicucho de cuarta se fuera a quien sabe que y mandase a un idiota con el resultado de sus análisis.

Jaekyung tomo muy molesto el resultado de sus exámenes y en vez de irse junto a la demás gente se dirigió a buscar al director del hospital para recalcarle la negligencia de su personal.

Se dirige a la sala de recepción y mientras avanzaba en el corredor presenció como una enfermera gritaba ante una herida de considerable tamaño en su mano, mientras que junto a ella se encontraba atado en una camilla un tipo que parecía más bien un animal rabioso. La escena fue más que grotesca y solo empeoró cuando aparecieron otros internistas, uno para tratar de ayudar a su colega herida y los otros trataron de calmar al encamillado sin éxito, ya que en vez de dejarse ayudar procedió a atacar ferozmente a los recién llegados.

- que mierda es esta ?- solto sin pensar asombrado, lo que no esperaba es que esa solo frase atraería la atención de los contrarios.

- señor no debe estar aquí váyase!- grito uno de los médicos cuando una mujer de la nada se le acercó y comenzó a morder su antebrazo, eso colmo la paciencia de Jaekyung y sin meditarlo agarro de los cabellos a la nueva mujer que se veía aún más trastornada que el hombre en la camilla y la arrojo a una habitación contigua cerrando la puerta.

¿Qué si podía noquearla ? Por supuesto, pero un atleta nacional y campeon del mundo no puede ir por ahí dejando mujeres inconcientes por mas desquiciadas que esten, después de todo tenia una reputación que cuidar.

- que demonios ocurren en este hospital?- demanda furioso.

- no lo sabemos .. empezó a llegar gente herida y enferma y empezaron a descontrolarse ...- contesto el otro médico que no estaba herido mientras trataba de ayudar a su compañero que había sido atacado recientemente.

- aaaah!- Un grito de terror atrajo su atención cuando el tercer enfermero, el que trataba de ayudar a su compañera herida por el sujeto desaforado de la camilla, era brutalmente agredido por la misma enfermera, la cual ahora tenía el mismo aspecto enfermo de los otros atacantes.

- debemos irnos !- dijo a trote el doctor que aún estaba ileso dejando de lado a sus colegas que ya empezaban a demostrar la misma irasibilidad que los extraños que los mordieron.

Jaekyung a pesar de lo que muchos pueden pensar es un hombre con formación en distintas áreas, pero nunca había oído sobre una enfermedad o condición que te haga morder a tus semejantes y mucho menos que al ser mordido empieces a comportarte de la misma manera. No iba a quedarse a averiguarlo así que se fue por otro rumbo buscando una salida pero cuando estaba cerca de ella observo una patrulla con las puertas abiertas y gente agrediendo a los transeúntes , e inclusive ya había en el suelo oficiales retorciéndose.

Nunca había presenciado algo así, por lo que dejo la idea de salir por allí, cambio de rumbo internadose más en el hospital buscando una salida alterna. En su camino se percató de que había otras gentes, todos civiles, siendo perseguidas o peor aún atacadas. Subió escaleras arriba pensando que tal vez pueda encontrar personal médico que pudiese darle información de lo que ocurría y de cómo salir de allí.  Entro a un consultorio que parecía seguro. Al ingresar cayó en cuenta de su error y un hombre con síntomas de esa extraña "rabia" se le fue acercándo para atacarle. Pero Joo Jaekyung no es la clase de hombre que cuando se ve amenazado se resigna. Dejo de lado el resguardo de su buen nombre y evitando la mordedura del "infectado" le tomo del brazo y lo tumba al suelo contra la mesa destruyendo todo , el infectado se volvio a parar como si nada; ahí sí colmo la paciencia del atleta que está vez lo arrojo por la ventana rompiendo a su vez el vidrio.

Con el pesar en su interior de que las cosas estaban tocando un punto sin retorno Jaek empezó a buscar en el consultó, algún mapa o información en el computador que indique salidas, ductos o información de la infraestructura en que estaba.
En ese momento escucho pasos llegando a la oficina por lo que se escondió en el vestidor tras la cortina. Su primer pensamiento fue que se trataba de otro enfermo así que salió de golpe listo para acertar un buen golpe. Pero ágil se freno a sí mismo al ver que se trataba de un médico, pronto reconoció que era el mismo idiota que le había entregado el resultado de su análisis hace unos momentos.