Heartlines. Pt1.

*Marcos*

~Marcos~

Hice lo de siempre, llegué de la escuela, comí algo rápido, llevé a Camila corriendo a la escuela, cuando volví me puse a jugar en línea un rato y después me eché a dormir una siesta. No había prestado atención a la hora, cuando sonó mi telefono, respondi con la cara babeada

Hola hijo,por favor, ¿podes ir a buscar a tu hermana a la escuela? me tengo que quedar un rato más en el trabajo, llego a las 7!

sisi esta bien, a qué hora sale? - respondí todavía dormido-

En media hora, bueno, tengo que volver, nos vemos mas tarde, chau chau

Y colgó. Mire la hora, si no salía ya iba a llegar tarde, de un salto me levanté fui al baño, agarré las llaves y salí corriendo. Volví con Cami, tomamos la merienda y la esperé a mamá. Llegó pasadas las 7, salí otra vez apurado a la librería. Nahira estaba sentada en una de las mesitas que hay para apoyar las cosas, me acerqué y no sé porque me salió en decirle por arriba por qué había llegado tarde, sabía que si le mencionaba a mi hermanita, no iba a quejarse.

Me acomodé como pude y prendí la máquina. Ella me alcanzó una hoja, la letra a pesar de que apenas leía algo, era llamativa. Pero dije lo primero que se me vino a cabeza:

AHH que letra de mierda, ni se entiende lo que dice.

Me gané una mirada de odio que me dio gracia. Luego mientras estaba buscando la información, vi que se levantó y salió rápido,

-voy al baño- Me dijo

¿Qué me interesaba a dónde iba?... Estaba en lo mio, con un airpod puesto, por que la música siempre tiene que estar ahí, hasta que escuché una melodía conocida, empezó a sonar "Last Nite" de los Strokes, busqué con la mirada y resultó ser el celular de ella, no sabía si era un mensaje o una llamada. Me quedé como de piedra. Nunca me hubiese imaginado que ella escucharía algo así, la creía más bien del palo con lo que estaba de moda, en realidad no le había prestado atención, hasta ese momento. Al poco tiempo llegó y otra vez mi cerebro:

¿Te gustan los strokes?

No, vos crees? -sarcastica-

Ah no creía que fenómenos como vos podrían escuchar eso.-no te pases niña, pensé-

Mira Marcos, si vas a venir a joder con esto, por favor retirate!!!! ya tengo bastante con aguantar tu existencia. -que susceptible-

Está bien, lo siento, señorita delicada.

Jodete.

Bueno, yo hice mí parte te la mando por mail?

Sisis,como sea.- Me dijo ignorándome, buscando cosas en su mochila-

Escuchá, si querés nos juntamos mañana en mí casa, para poder terminar esto de una buena vez, va a estar mí mamá, te aviso. -me salió de forma inconsciente, tal vez me había sentido culpable por haber llegado tarde, pero no sé por qué le dije lo de mi madre, que me había pasado?-

Ah bueno. Cómo a las 6 ando por ahí. -aceptó y confirmó-

Ok -me fui de la librería, ya era tarde y apenas pudimos hacer algo-

Chau -se despidió-,

¿Tendría que haberla acompañado a su casa? Hey qué te pasa amigo? Como se nota que todavía estás sin descargar esas necesidades!! me regañé a mi mismo, saqué el paquete de cigarrillos y fui tranquilo hasta casa. Mañana sería otro dia.

Otra vez repetí la rutina, pero esta vez no me eché a dormir, me quedé jugando con unos amigos de Rusia. La partida estaba en su cenit, cuando siento que me tocan el hombro, me di vuelta para ver quien se había metido a mi cuarto sin permiso y era ella.

Esperame 10 minutos que termine la partida, dejá tus cosas por ahí y sentate en la cama o en el piso. Como quieras. -le dije-

Ok

Terminé rápido la partida, les dije a mis amigos que mi abuela se había caído y que no podía jugar más. Me levanté de la silla y la ví parada frente a mis repisas, donde estaban mis colecciones de música y libros. La mayoría de los lp eran del idiota de mi padre, lo mínino que pudo haber hecho fue dejar esos tesoros, los libros raros eran cortesia del abuelo junto con el tocadiscos, por suerte los heredé antes de que se fuera (lo extraño bastante), y los cds me los fui comprando desde chico, incluso todavia compraba algun que otro album raro.

 Ella parecía no estar en este mundo, cuando me acerqué y le hablé se sobresaltó, sonreí para mi mismo:

-No toques nada. Seguro que lo rompes

- ay no seas tarado, si han sobrevivido a tus manos...Ayyy no puede ser, el disco de la Velvet!!! No lo puedo creer! no se consigue casi por ningún lado. Ahhh y esto?? No nonono, no puede ser, qué haces con esto?-estaba en una especie de éxtasis-

¿Qué cosa?- haciendome el tonto-

No te hagas el otro, sabes qué es esto. Es el primer disco de Joy Division. -lo dijo como si huberia encontrado la Atlántida, me causó mucha gracia  cada una de sus reacciones, nunca había conocido a alguien que le apasionara de esa forma la música, incluso con los chicos no teníamos las mismas opiniones-

¿Puedo?

Dijo señalando el tocadiscos, con los ojos llenos de emoción y muy brillantes.

Si. Elegí solo uno, hace mucho que no limpio la púa y la bandeja, no quisiera que se rayaran- era cierto, hace bastante que no uso el aparato y no iba a permitir que mis tesoros se arruinaran por esa niña curiosa-

Sisi

Tras decir eso, eligió el primer disco de mi banda favorita, los Smiths. Cuando lo puse el disco, Nahira entró en un estado de trance, cerró los ojos y me quedé mirándola creo que por un buen rato, porque ya iba por el último track. No sabía cómo asimilar lo que acababa de pasar. ¿Ella y yo con los mismos gustos musicales? ¿Cómo es eso posible? somos tan diferentes, yo soy un desastre y ella es el ejemplo de la perfección... esto estaba mal. Abrió los ojos y me sorprendió mirándola fijo, enseguida corrí la cara, maldición me había puesto rojo... Ella dijo algo, que apenas pude escuchar, sacó el disco y lo puso en el lugar con sumo cuidado. Agarré la net, me senté en la cama y puse música, no quería que se diera cuenta que me había puesto nervioso y no podía prender un cigarrillo delante de ella, porque seguro iría corriendo a decirle a mi abuela. Maldición!

Pasamos lo que quedó la tarde en silencio y de vez en cuando coincidimos cantando alguna cancion, lo que me tomó desprevenido la primera vez, pero después incluso llego a ser gracioso y hasta cómplice, dándome a entender qué canciones le gustaban mas.

Huy se hizo tardísimo, me tengo que ir, sino mamá se va a asustar que no estoy en la casa. -dijo acomodando todo rápido en la mochila

Si querés te podés quedar a comer, no creo que mamá se oponga

Otra vez mi cerebro actuando por si solo. Cuando analicé las palabras que habia soltado, me puse muy tímido y me rasque la nuca, como hacia cuando me intimidaba una situación.

No no, es mejor que me vaya. Es mucho por hoy. Necesito seguir con los demás trabajos.-me dijo rápido-

Ah, ok. Bueno, nos vemos el lunes.-no sé porque pero sentí un pinchazo de decepción-

Chau, buenas noches. - Me saludó con un movimiento de mano y se fue de mi habitación.

Esa semana había sido la más rara de hace mucho y no sentí la necesidad de ir con Daniel a la plaza, estaba cansado y stresado como siempre, pero me sentía mas ¿liviano? Como puede ser pasar de querer casi matar a mi vecina a que me llame tremendamente la atención y querer seguir hablando de música?

Antes de irme a dormir le volví a mandar mensajes, no sabía qué decirle. Pero no resultó tan mal como la última vez, por lo menos no me bloqueó. Cuando volví del baño dispuesto a tirarme en la cama, encontré una pua en el piso, claramente no era mía y de los chicos tampoco, hace mucho no vienen a casa. ¿Será de ella? Bueno, el lunes tenía una buena excusa para hablarle, aparte de esta mierda de proyecto.