Capítulo 03

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Barcode se encontraba justo delante de la agencia en la que iba a tener que estar durante una semana, y la verdad era que no se sentía con ganas de entrar, sonreír falsamente y estar tan tranquilo con Ta fingiendo ser su pareja. Quería que el juego acabara, ¡y aún no había empezado siquiera!

Se quedó en la puerta y no sabía qué hacer, no sabía si preguntar por Ta en recepción o esperar a que alguien saliera y le preguntara por qué estaba allí, se estaba poniendo nervioso de momento. De pronto escuchó voces y vió a alguien salir por la puerta de vidrio tintado, era un niño castaño que sostenía la puerta mientras un chico azabache salia cargando una caja que parecía pesada. Cuando el castaño se dió la vuelta y el azabache por fin pudo salir, se dió cuenta que eran Fuaiz y Mio, los reconoció como amigos de Ta.

—Oh, entonces es verdad. Estás aquí, Barcode —le dijo Mio un poco sorprendido, sonriendo después—. ¡Me alegro de verte!

—Fuaiz se alegra de ver a Barcode —acompañó el pequeño con voz juguetona y una sonrisa.

Barcode intentó sonreír lo mejor que pudo, pero como siempre solo pudo poner una mueca extraña.

—Yo también me alegro de verlos —les respondió con sinceridad, luego vio apenado a Fuaiz, sabía que el niño era muy apegado a Bible—. ¿No les molesta que este aquí? —preguntó en tono bajo, preocupado porque su presencia no fuera deseada.

—No, para nada. ¿Por qué preguntas eso? —curioseo Mio poniendo la caja en el suelo.

—No lo sé. Creí que sería un poco raro que venga a... tomar, el lugar de Bible —porque en parte sentía que eso estaba haciendo. Estaba irrumpiendo en la agencia de Bible, tomando su trabajo, su lugar, y a su pareja.

—Voy a extrañar a mi amigo —dijo Fuaiz sobándose el brazo izquierdo con la mano—, pero solo será por una semana, así que no está tan mal, además estarás tú en su lugar.

—Lo siento, Fuaiz —se disculpó Barcode sintiéndose realmente culpable. No podía quitarse la sensación de estar usurpando un lugar que no le pertenecía. Y eso le hacía sentir incómodo y mareado.

De repente alguien salió empujando la puerta y a Mio de paso, haciendo que los dos casi calleran sobre la caja que estaba en el suelo. El nuevo chico pelinegro se empezó a reír abrazando a Mio, quién no pudo reclamarle por casi haberlo hecho caer porque la risa del chico era muy contagiosa, y terminó riendo con él.

Cuando pararon de reír el chico pelinegro notó la presencia de Barcode, quién los veía un poco preocupado, y al reconocerlo soltó a Mio volviendo a casi hacerlo caer.

—¡Estoy tan feliz de verte, Barcode! ¡Ha pasado mucho tiempo! —lo saludó enérgicamente y dándole un abrazo.

Barcode se sorprendió por la repentina acción pero intentó corresponderle al reconocer que era Bump, un antiguo amigo. Bump lo soltó luego de darse cuenta que lo estaba literalmente aplastando entre sus brazos y se separó con una sonrisa.

—Lo siento, es que ha pasado mucho tiempo y estoy emocionado —se disculpó.

—Yo también me alegro de verte, Bump —lo saludó con una sonrisa más natural—. Y créeme, prefiero un abrazo efusivo antes que uno obligado —comentó no pudiendo evitar recordar a Jeff y sus últimas muestras de cariño. Sin embargo se golpeó mentalmente. ¡No podía pensar en Jeff! ¡Tenía una semana entera para conseguir olvidarse de él! 

—¿Quieres ver las instalaciones? —le preguntó Bump con una sonrisa, Barcode aceptó y caminaron juntos a la entrada después de despedirse de los otros dos.

Pasaron la recepción donde una muchacha de cabello negro les saludo y le dió a Barcode un pase de acceso que debería de usar para poder entrar. Pasaron por un salón de ensayos cuando Barcode sintió como alguien le tomaba del brazo abrazándolo. Volteó a ver asustado y vió a Fuaiz.

❝Intercambio de Parejas❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora