Jeff y Barcode llevan saliendo casi un año y medio. Se quieren, pero el paso del tiempo ha hecho que Jeff soporte menos algunas actitudes de Barcode, y la idea de terminar con él ha pasado por su cabeza en varias ocasiones.
Ta y Bible, a pesar de su...
Aquel día Jeff había podido dormir muy bien, por primera vez en mucho tiempo no tenía ningún remordimiento. Le había dado a Barcode un mensaje tan sincero y simplemente viendo su expresión supo que lo iba a perdonar, porque sabía que el castaño estaba profundamente enamorado de él, y daba igual lo idiota que hubiera sido, Barcode siempre lo perdonaría.
Por supuesto, no pensaba en sólo decirle eso, porque aunque sabía que Barcode lo quería con todo su corazón, perdonándole con sólo esas palabras, quería tratarle bien, muy bien, como al principio de su relación, en la que sólo tenía ojos para él. Quería decirle todo lo que le amaba y le quería... porque él se merecía todo eso y mucho más.
Estaba en el suelo, dando vueltas como un tonto sin parar, tirando un cojín para arriba, cuando de pronto Bible lo tomó y Jeff se indignó, pero él estaba más indignado y decidió no saltar, porque si algo había aprendido de Bible en esos días era que tenía muy malas pulgas y que era mejor no enfadarle por su propio bien.
—¿Qué pasa? —le preguntó cordialmente, aún con una sonrisa tonta.
—Primero de todo, me alegro que estés más contento por tu relación con Barcode —comenzó con una leve sonrisa, el azabache asintió feliz—. Segundo, sigo siendo tu invitado y ya estamos al quinto día de este juego y estoy aburrido —le explicó, a lo que Jeff se puso nervioso porque tenía razón, había estado pensando tanto en Barcode que se había olvidado de Bible completamente.
—¿Quieres hacer algo hoy? —le preguntó sabiendo que era lo que estaba buscando.
Bible sonrió con malicia.
—Quiero ir a un sitio donde hay un montón de actividades. Venga, será divertido —le animó y el azabache sonrió.
—Claro, vamos, pero espero que luego no me des la tabarra —bromeó y Bible comenzó a reírse.
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Al final acabaron yendo hasta el lugar en el auto de Jeff, mientras hablaban de varias cosas. Y a decir verdad, a Jeff, Bible le parecía alguien muy callado, pero habían estado hablando muy animadamente y de diversos temas.
Estuvieron haciendo algunas actividades que eran más o menos como juegos de feria. Jeff no conocía el sitio pero se había llevado una agradable sorpresa, y pensó que sería un buen sitio para llevar a Barcode en el futuro.
— ¿Y cómo es que conocías este sitio? —curioseo y entonces pudo ver como las mejillas de Bible se ponían algo sonrojadas, lo cual le extrañó. Luego sonrió pícaramente.
—¿Ves esa noria de ahí? —le preguntó Bible y el azabache asintió—. Bien, vine con Ta porque nos regalaron unas entradas para venir... Estábamos en esa noria y se averió. Estuvimos tres horas ahí adentro. Y tres horas... bueno, dan para mucho.
—Bueno... no tendría que haber preguntado —susurró Jeff pero más bien en forma de broma, poniendo cara graciosa de trauma, Bible se rio por eso seguido del azabache.
