La vida en realidad se trata de un ciclo sin fin. Todo lo que comienza, llega a su fin y, lo que termina, vuelve a empezar. Así es como funcionan las cosas. En el vasto universo del destino, las almas gemelas están destinadas a encontrarse una y otra vez, a través de diferentes épocas y en distintas formas, para compartir su amor y su conexión eterna.
Cuando llega el momento de la muerte, el alma se libera de su envoltura terrenal y emprende un viaje hacia el más allá, donde aguarda el próximo capítulo de su existencia. Pero el lazo que une a las almas gemelas es tan fuerte que trasciende incluso la muerte, guiándolas hacia un reencuentro inevitable en una nueva vida.
En el tranquilo aula de la escuela primaria, la maestra de Hikaru, de 11 años, terminó su explicación sobre la leyenda de las almas gemelas y los colores. Los niños murmuraban entre sí, algunos parecían incrédulos, mientras que otros simplemente la escuchaban con atención, pero Hikaru estaba especialmente interesada en lo que acababa de escuchar. ¿Sería posible que hubiera un alma gemela destinada para cada persona, y que el mundo se llenara de colores cuando finalmente se encontraran? Aunque no tenía idea de qué podrían ser los colores, la idea de conocer algo nuevo la intrigaba.
El timbre del recreo sonó, anunciando el esperado descanso para los estudiantes. Hikaru se levantó de su asiento junto con sus compañeros de clase y se dirigió hacia la puerta. El bullicio del pasillo la rodeaba mientras caminaba, pero algo en su mente seguía rumiando la idea de las almas gemelas.
De repente, se dio cuenta de que sus agujetas estaban desatadas, y decidió detenerse para atarlas antes de salir al patio. Mientras se inclinaba para atar sus zapatos, una niña chocó contra ella, haciendo que los libros que esta cargaba salieran volando por los aires.
─ ¡Oh, lo siento mucho! ─ exclamó la niña, apresurándose a recoger los libros del suelo. ─ Iba hacia la biblioteca y... No vi por donde iba.
─ No te preocupes, fue mi culpa también ─ respondió Hikaru con una sonrisa, mientras se agachaba para ayudar a recoger los libros.
Cuando sus manos se encontraron para recoger el mismo libro, algo extraño sucedió. Una sensación de electricidad pareció correr por el cuerpo de Hikaru, y de repente, el mundo que siempre había visto en blanco y negro se llenó de colores mágicamente a su alrededor. Los colores no se asemejaban a nada que hubiera visto antes, pero a la vez se le hacían tan familiares. Miró a la niña frente a ella, y se dio cuenta de que ella podría estar viendo los mismos colores brillantes.
─ ¿Qué está pasando? ─ preguntó la niña, con una expresión de asombro en su rostro mientras miraba a su alrededor.
─ No lo sé, pero es increíble ─ respondió Hikaru, maravillada por la experiencia.
Se quedaron mirando la una a la otra por un momento, sumidas en el asombro de lo que acababan de presenciar. Finalmente, la niña rompió el silencio, balanceándose sobre sus talones.
─ Soy Bahiyyih ─ dijo, extendiendo la mano hacia Hikaru.
─ Hikaru ─ respondió, estrechando la mano de la niña.
En ese momento, una ráfaga de destellos de colores bailó alrededor de ellos, iluminando el pasillo de la escuela con una energía brillante y cálida. Hikaru y Bahiyyih se miraron con una sensación de familiaridad que trascendía el tiempo y el espacio, como si se hubieran conocido en otra vida.
─ ¿Tal vez la leyenda sí sea cierta? ─ musitó Hikaru, con una sonrisa en los labios.
Bahiyyih asintió con una mirada llena de emoción y asombro.
─ Tal vez sí ─ respondió.
Fin.
Maraton 3/3
Llegó el fin. Alguien ya predijo el final y nananana no puede ser HAJDJWK pero bueno, espero que les guste TT ♡ a mí me gustó mucho mucho mucho.
AH POR CIERTO, Happy Mina's Day!!!!!!
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ᴏɴᴄᴇ ʏᴏᴜ ꜱᴇᴇ ᴛʜᴇᴍ | ᴍɪᴄʜᴀᴇɴɢ
Fiksi Penggemar❝En un mundo donde la gente nace siendo incapaz de ver colores hasta que ve a su alma gemela, Chaeyoung parece ser la excepción y Mina no cree en las almas gemelas.❞ ☆˖° Michaeng. ☆˖° Mayormente soft, un poco angst. ☆˖° Mención de otros ships, tanto...