𝐈𝐍𝐓𝐑𝐎𝐃𝐔𝐂𝐂𝐈𝐎́𝐍

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Ryomen Sukuna fue un hombre que tras morir, se convirtió en la maldición más poderosa de todas... Llegando a ser denominado como "el rey de las maldiciones".
Pero como cualquier ser maldito, no se conformaba con comer comida humana y simple... Claro que no. Su dieta estaba conformada por niños inocentes y mujeres vírgenes, cuyo sabor era exquisitamente dulce y agradable al paladar de aquel monstruo; asimismo, este repudiable ser disfrutaba de "jugar" con su comida: torturar a sus víctimas hasta que no se pudieran mover, entonces Uraume los cocinaría vivos para el placer de su amo y maestro.

Sukuna no obtendría su comida por su propia cuenta, eso es de débiles. La aldea donde su santuario de adoración se ubicaba vivía atemorizada con la idea de que el rey de las maldiciones exterminara todo y a todos en cualquier momento, así que le llevaban ofrendas valiosas para apaciguarlo.
Las cantidades de niños y mujeres jóvenes que eran ofrecidos a la maldición, eran exhuberantes. Pero el rey quería algo más... Gente importante. Así que la siguiente fue la hija del emperador, y después la heredera del clan Zen' in... Y así, las jóvenes de clanes de hechiceros reconocidos fueron llevadas al santuario, esperando su sangriento final.

Ahora era turno del mayor prodigio: una niña del clan Gojo cuyo don de nacimiento eran los 6 ojos. La pobre ni siquiera sabía lo que le deparaba. Sus padres tampoco se inmutaron en intentar salvarla, pues pensaron que su sacrificio aportaría a que el pueblo tuviera un futuro. En pocas palabras, la consideraban un instrumento que ayudaría a traer la calma por un momento más.

La niña es llevada a la presencia de Ryomen Sukuna, con únicamente puesto un camisón blanco muy desgastado y vendajes alrededor de sus ojos.

-Mira que tenemos por aquí...~ -exclama Sukuna con una sonrisa muy grande en su rostro, mirando con desprecio a la niña.










𝘾𝙤𝙣𝙩𝙞𝙣𝙪𝙖𝙧𝙖́...✰

"𝐓𝐇𝐄 𝐃𝐄𝐕𝐈𝐋" 𝒂 𝒇𝒂𝒏𝒇𝒊𝒄𝒕𝒊𝒐𝒏: 𝑺𝒖𝒌𝒖𝒏𝒂 𝒙 𝒓𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora