𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐈

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La pobre niña fue abandonada a su suerte frente al rey de las maldiciones, el aura de este era tan denso que imponía apenas estuvieras a unos pasos de él... Pero extrañamente, t/n no sentía miedo, ni impotencia. No sentía absolutamente NADA.

-Vaya vaya... ¿Pero que tenemos aquí?- dijo Sukuna con desdén.

T/n no responde, ni reacciona.

-Oye, ¿Por qué tienes esas vendas puestas en la cara? No me digas que es el envoltorio- suelta carcajadas escalofriantes que resuenan por todo el lugar- Quítate eso, niña.

-No puedo- dice t/n con indiferencia.

-HUH?! ¡¿Que quieres decir?! ¡¡¿ME DESOBEDECERÁS, PEDAZO DE BASURA?!! -le da un fuerte golpe al apoyabrazos de su silla.

-No creo que sea necesario quitarme esto. Solo comes el cuerpo, pero la cara no... ¿Me equivoco?

Sukuna ríe.

¡JAJAJAJAJAJAJAJA!- ¿Que te hace pensar que yo no como la cabeza? Mi parte favorita es remojar los ojos en sangre y comermelos como bocadillos~ ahora quítate eso. Dice con un tono severo, casi como un gruñido. Está niña lo estaba poniendo de mal humor.

-No creo que mios ojos sean aptos para tus bocadillos... -se quita la venda de la cara, mostrando sus hermosos ojos color azul celeste, evidencia de que nació con los seis ojos del clan Gojo.

Sukuna a primera vista identifica los ojos de la niña, si acaso le sorprende, pero tampoco le provoca nada. Simplemente se limita a soltar una media sonrisa, sus 4 ojos escaneandola de pies a cabeza desde su trono.

-Con que eres una de esas cucarachas del clan Gojo con esos 6 ojos, huh? Igual me sirven de bocadillo.

-Ya no importa... Haz lo que quieras conmigo. Igual, nací sola y sé que moriré sola. Además, es predecible lo que harás conmigo.

Sukuna la sigue mirando con algo de desprecio, completamente indiferente a las palabras de T/n.

Sukuna piensa: Creo que sería un desperdicio solo comermela. Si la entreno y la crío, tal vez sea un instrumento fundamental para eliminar a todo ser humano repugnante de este mundo. Si... Ella podría darme esos bebés y esa comida en general.

Uraume- dice Ryomen con una voz calmada.

Dígame, amo Sukuna- aparece Uraume en menos de un segundo, de rodillas frente a la maldición.

Lleva a esta mocosa al cuarto cerca del mío, bañala y vístela. La quiero lista para la cena- lo dice con exigencia.

-Si maestro.

𝘾𝙤𝙣𝙩𝙞𝙣𝙪𝙖𝙧𝙖́...✰

"𝐓𝐇𝐄 𝐃𝐄𝐕𝐈𝐋" 𝒂 𝒇𝒂𝒏𝒇𝒊𝒄𝒕𝒊𝒐𝒏: 𝑺𝒖𝒌𝒖𝒏𝒂 𝒙 𝒓𝒆𝒂𝒅𝒆𝒓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora