CAPITULO 31 LA TORMENTA

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001.M31 - Salutis, Palacio Receptuma, Ala Familiar

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Horus dejó escapar un murmullo mientras despertaba, estirándose y rápidamente encontrando su cama más cálida de lo esperado.

Ah… rápidamente se dio cuenta de que acababa de perder una apuesta bastante importante con su tío.

De pie, rápidamente adornó su forma desnuda con una bata simple mientras miraba al grupo de casi una docena de mujeres, todas con diversas formas de vestir o desvestirse de la noche anterior.

Habían llegado a la cama después de probar muchas otras cosas, y Horus tuvo que admitir que hacerlo por verdadera diversión era bueno... divertido.

Sin embargo, una cosa era segura: no iba a correr riesgos.

Caminando hacia el teléfono de voz incorporado, levantó el auricular, listo para susurrar palabras tranquilas al redirector que debía atender la línea y dirigirlo a quien solicitara o simplemente convocar a las personas o cosas que necesitaba.

Sólo para encontrarse con el pitido revelador de una línea desconectada.

Qué extraño… Rogal y Perturabo insistieron en que las ampliaciones y renovaciones del ala familiar ya estaban completas.

Sin pensar más allá de que se trataba simplemente de una dificultad técnica, Horus fue y se duchó antes de vestirse con unas túnicas relativamente sencillas, regresó a su dormitorio y encontró a todas las mujeres todavía dormidas.

Decidió enviar siervos y otras personas para que limpiaran su desorden por él, pero salió de sus apartamentos, se acercó y llamó a la puerta de Leman, esperando una respuesta del Rey Lobo, quien sin duda también se había entregado a su propio botín del baile.

Después de un minuto, Horus todavía no escuchó pasos y golpeó la puerta con los nudillos por segunda vez.

"Extraño." Dijo Horus, incrédulo de que su hermano sería por una vez el responsable. Y aunque normalmente se sorprendería gratamente, esto, junto con su línea de voz desconectada, lo puso nervioso. Esto no puede ser una coincidencia.

Continuó por la fila, encontró la puerta de los apartamentos de su hermano Fulgrim y rápidamente golpeó la puerta con los nudillos.

“¡Fulgrim!” Pidió que se tomara buena medida.

"Sí, sí, un segundo". Escuchó a cambio el grito bastante fuerte.

Horus esperó pacientemente durante lo que probablemente fueron unos minutos, antes de que finalmente escuchara pasos y la puerta se abriera, revelando a un Fulgrim muy malhumorado, vestido con una túnica que se había puesto apresuradamente.

“¿Qué-qué quieres Horus?” Fulgrim parpadeó y se secó la cara. "Estaba uhm... en medio de algo".

“¿Tu línea de voz también está desconectada?” Horus salió corriendo, descartando la idea de que su hermano estuviera fornicando.

"¿Qué?" Fulgrim preguntó confundido. "¿En serio me has despertado, cuando tengo esta resaca y aun así comparto la cama con mi maravillosa esposa y mi hija, sólo para preguntarme sobre el estado de mi línea de voz?"

"Mi línea de voz está desconectada y Leman no está en su habitación".

Fulgrim parpadeó dos veces y luego rápidamente alcanzó el receptor de voz que estaba al lado de su puerta.

Horus escuchó el pitido.

"Algo ha pasado." Murmuró Horus, señalando a su hermano.

"Me vestiré". Fulgrim inmediatamente se puso serio.

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