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— ¡Jungkook, Chae y Minnie juntos en otra aventura! — gritó entusiasmado abrazando a sus primas.

— Y con Mina de nuestro lado — añadió Minnie.

— ¡Y con Mina de nuestro lado! — la abrazó también.

La japonesa aceptó con gusto el gesto de Jungkook.

— Mina, espero que estés acostumbrada a perder porque es lo que mejor hacemos... — dijo Chaeyoung riendo.

— ¡Chaeng! — se quejó Jungkook — No le hagas caso, ésta vez vamos a ganar.

— Además que tenemos a un policía de nuestro lado. — dijo Minnie.

— Mina, ¿has tenido que enfrentarte a algún criminal peligroso?

— Claro que sí. De hecho la última semana tuve un caso muy interesante... — dijo mirando a Chaeyoung con una sonrisa.

— ¡Tienes que contarnos! Pero ahora hay que ir a jugar.

Mina asintió con una sonrisa mientras recibía una mirada amenazante de Chaeyoung, que más que intimidarla, le causó gracia y ternura.

La competencia fue divertida. Jugaron toda la tarde y a pesar de que el equipo de Jungkook perdió, lo pasaron muy bien y la japonesa pudo acercarse más a ellos.

— Mina — la llamó Mingyu del otro lado de la cancha.

— Romeo te espera, Julieta — dijo Chaeyoung.

Mina sólo la miró por unos segundos y se acercó al pelinegro que la recibió con un abrazo y un beso.

— Te extrañé mucho, preciosa.

— Podrías haberlo pensado antes de no elegirme para tu equipo — respondió con recelo.

— ¡No fue mi culpa! — se quejó — el imbécil de Jungkook te llamó antes...

— Eso fue porque no me escogiste en primer lugar...

— ¿Te vas a enojar por eso?

Mina suspiró y volvió abrazarlo.

— No, tienes razón, es una estupidez... Además lo pasé muy bien con tus primos.

— ¡Eso si que es novedad! — rió — Porque estuviste en el equipo más aburrido. Que esté Chaeyoung dice mucho...

La castaña miró a la distancia a la coreana, sorprendiéndose al notar que ella también la miraba mientras comía palomitas.

— En realidad me gusta Chaeyoung, es una persona agradable...

— Si, claro... agradable — dijo mientras ponía los ojos en blanco.












La última noche llegó rápido. Ésta vez harían una fogata.

Durante la tarde, Mina y Chaeyoung compartieron un par de conversaciones esporádicas y se sentaron juntas en la cena.

— ¿Por qué estás separando tu comida? — preguntó Mina riendo.

— Es que no me gusta la cebolla y hay mucha — respondió con un puchero.

wonderwall | MICHAENGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora