Su alarma sonó a las 5 AM como todo adicto al trabajo, generalmente se levantaba mucho antes para revisar los mails laborales, sin embargo cuando despertó se vio un poco perdido, inmediatamente recordó donde había pasado la noche... Estaba solo en esa gran cama, la sabana tapaba su cuerpo y podía sentir la calefacción del piso, que el departamento sea un piso completo sin divisiones, lo ayudo a encontrar rápidamente al mayor. Lo vio sentando en el piano tocando nuevamente algunas notas, recordó la primera vez que había dormido en el sillón... Sonrió como tonto y se levanto, sus ropas estaban dispersas a los alrededores de la cama, tomo su ropa interior y la camisa, cerro unos cuantos botones y cuando volvió la vista al mayor, noto que lo estaba mirando... dejo olvidado su plan de vestirse y se encamino hacia el, sus pasos ahora eran seguros y confiados, JongWoon dejo de tocar esa hermosa melodía y atrapo su mano, para sentarlo sobre el, las piernas de Kyuhyun prácticamente abrazaban esa cadera - Buen día mocoso - le dijo sosteniendo sus mejillas - ¿Dormiste bien? -
Demasiado bien... el único problema es que debo ir al trabajo - le dijo recostando su cabeza en el cuello del mayor, para luego aspirar ese magnifico perfume que siempre estaba adherido a su piel, ya no tenia la seguridad de si era la fragancia del mismo o el aroma de JongWoon - Tu... ¿no dormiste? -
Unas cuantas horas... pero es mas interesante verte a ti dormir - Kyuhyun sonrió completamente pegado a esa piel tan cálida y las manos de JongWoon comenzó a tocar la misma melodía que antes escucho acompañada de esa rasposa voz, tan profunda y atrapante - No quiero saber lo que es vivir sin ti... no quiero conocer el otro lado, de un mundo sin ti -
¿Y eso? - le pregunto el menor sorprendido por la facilidad que tenia para la música - suena demasiado triste -
No lo se bebe, simplemente salio... pase unas cuantas horas observándote dormir, estas aquí conmigo... sin embargo no puedo evitar sentir miedo, temo perderte y que desaparezcas - Esas palabras arremetían sus pensamientos, no tenia idea de cuan roto estaba JongWoon.
No me iré a ningún otro lado, mas que a trabajar... no tengas miedo - le dijo intentando transmitirle la seguridad que claramente le faltaba al mayor.
¿Me quieres? - Se separo de su lugar de seguridad para ver esos ojos negros tan expresivos y asintió seguro - Detesto esta parte de mi... me escondí tanto tiempo en diferentes personas y llegaste tu... rompiendo completamente mis barreras -
¿Eso es malo? ¿No quieres estar conmigo? - pregunto, dejándose llevar por esa tristeza que veía en los ojos de JongWoon.
Quiero todo contigo... No sabia lo egoísta que podía llegar a ser hasta que te conocí - sintió esos labios besar los suyos, de esa forma tan suave prácticamente como un sueño irreal. Se aferro completamente a esa espalda - Desearía que mi familia no estuviera en medio - le dijo en un susurro.
No quería irse, no quería dejarlo ahora, mas en ese momento tan vulnerable, no tenia ni idea a que se refería cuando nombro a su familia, sin embargo sus obligaciones laborales, estaban ahí... el reloj corría tan cruelmente... Se separo con el dolor de su alma - Hyung debo irme -
Kyu... por ahora no digamos nada sobre lo nuestro - lo miro sorprendido, pero termino aceptando en silencio - Dame tiempo para resolverlo -
Aun no amanecía, cuando iba sentando al lado de JongWoon, debía buscar sus cosas para ir a trabajar. No puedo evitar pensar, se sentía tan diferente... en otro momento de su vida, probablemente abriría la puerta del despacho del señor Kim y exigiría el puesto de gerente, gracias a su reciente relación con el mayor, sin embargo acepto mantener el silencio.
Cuando paso la puerta corrediza del trabajo, noto que aun su boda fallida era el tema del momento, bajo la cabeza y camino rápido, intentando esconderse de las miradas. La recepcionista nuevamente lo alcanzo en el ascensor como hace dos semanas - El señor Kim te espera en su despacho -
ESTÁS LEYENDO
El precio del éxito
FanfictionCho Kyuhyun se vio a si mismo enredado en una delicada decisión ¿Amor? ¿Acaso es real? Dinero, estatus, posicionamiento y reconocimiento, objetivos de cualquier hombre promedio.