Reflejo.

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El cielo nocturno era familiar, sin duda ya había visto uno así antes pero no sabia exactamente donde. El aire aunque frio, era agradable acompañado de aquella luz que me ayudaba a terminar mi tarea, aunque sabia que lo que hacia estaba mal y que no era algo bueno, simplemente no podía detenerme, de hecho no quería hacerlo hasta terminarlo, pero había algo que me molestaba y eso es que sentí que me observaban, sin duda podía notar la mirada eufórica de aquel comandante en mi, intentando reconocer donde estaba mire en ambas direcciones encontrándolo pudiendo ver donde se encontraba, la escalofriante expresión de euforia que tenia era perturbadora, gran sonrisa mientras juntaba las manos balbuceando algo, una verdadera gestualidad y expresión de un enfermo mental, pero no me podía importar menos en este momento tan importante, ignorándolo seguí con lo mío, uniendo hábilmente aquellos cortes que mi amiga tenia en su cuerpo, aunque no estaba segura si estaba muerta, me sentía feliz de ayudarla.

—Esta bien, yo te protegeré de ese comandante.— Le dije a 37 mientras acariciaba su cabello, aunque no obtuve ninguna respuesta de su parte.

—Suspiro.— Me molesta que ese comandante siga mirándonos fijamente, ¿Qué es lo que quiere?.

—38, SERAS UNA BUENA HERRAMIENTA, NO CAMBIES NUNCA.— Grito aquel comandante mientras se retiraba, ¿A que se refiere? Pensé, cuando un rechinido me interrumpió haciéndome mirar hacia mi derecha dándome cuenta de que estaban abriendo las pesadas puertas, dejando entrar una ráfaga de viento que levanto una gran nube de polvo dentro del edificio. Cuatro hombres vestidos de negro con mascaras que cubrían la mitad de su cara entraron corriendo llevándose a los heridos, viendo la figura de 00 en los hombros de aquellos soldados. Me hizo salirme de mi burbuja ¿Que estaba haciendo? en ese momento me di cuenta de que mi pequeño espacio vacio no estaba vacío, estaba tan profundamente concentrada en mi "tarea" que no note el caos que habia en la arena, mi mirada inconscientemente se fijo en uno que corría hacia mi, paro en seco a mi lado levantando una pequeña nube de polvo, viéndome aun con la cabeza de 37 encima de mis piernas pude escuchar un balbuceo que no comprendí mientras notaba como su expresión debajo de esa mascara pasaba de tranquilidad a una mirada incrédula, sus ojos estaban fijados a el cuerpo suturado se 37. Casi asqueado, evito tocarme al levantarla colocándola en sus hombros corriendo hacia la puerta rápidamente.

Viendola irse repentinamente alguien tambien me levanto por la espalda colocandome una bolsa en la cabeza, dandome cuenta de mi estado, ya habiendo salido de aquella cegadora concentracion. Me sentia cansada, ya no podia mantener mis ojos abiertos en aquella oscuridad, cayendo en el mas profundo sueño.


















—¿Como esta doctor?— Eh? Esa voz es.... ¿Marc?

—37 Esta casi muert-----— Se escucha a alguien decir a la distancia, abri un poco mis parpados no lograba enfocar nada, sentia sueño, mucho sueño.

—Vete, Marc estamos ocupados— ............

—Que mounst--- —¿Enserio solo con una aguja y hilo?— ¿Quien esta hablando? N-no puedo mantener mi pensamiento................................................


—00, esta muy herido tambien-—

—Pero el no tiene riesgo vital dejalo asi.— Escuche sintiendo un poco de alivio al saber que 00 estaba bien

—38 esta muy herida, si la dejamos asi podria morir.— ¿Yo estoy herida? Pero si no me duele nada.

—Curala imbecil, ¿Quieres que nos decapiten?— Una sensacion calida me envolvio, como si mi madre hubiera atravesado mundos para darme su calor, como si estuviera en invierno comiendo pan recien horneado junto a mi familia. Todo el dolor que mi cuerpo estaba ignorando se hacia notar dando una sensacion de alivio casi automatica.

Reencarnado en una guerra, Kill Them All.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora