《Mía》

Capítulo 9

Ronnie salió del ascensor encontrándose con Zoe junto la puerta de su departamento.

—Zoe... ¿Qué haces aquí? —preguntó caminando hacia ella y poniéndose a la altura de la chica quién estaba hecha un mar de lágrimas.

—Perdón Ronnie, no sabía a dónde más ir —exclamó la rubia.

—Déjame abrir la puerta —dijo levantándose y buscando sus llaves. Ayudó a su cuñada a levantarse y la hizo entrar una vez que la puerta estaba abierta.

—¿Acabas de salir del trabajo? —preguntó Zoe, Ronnie negó y se puso nerviosa.

—No,  fui a hacer unas compras... —murmuró y luego recordó que no llevaba ninguna bolsa— pero no había nada de lo que necesitaba. Pero bueno, ¿qué pasó?, ¿por qué estás así?

—Adam y yo discutimos... —respondió la chica sollozando— le dije que creo estar embarazada y él sólo dijo: "¿Es mío? ". ¿Puedes creerlo?

Ronnie la miró sorprendida, nuca creyó a su hermano ser capaz de decir algo así, no a Zoe que era la chica que amaba.

—Pero... ¿Cómo?, es decir... no puedo creer que Adam haya dicho algo así —titubeó incrédula.

—Pues creelo —Espetó Zoe— Lo siento Ronnie, sé que está mal venir a contarte esto... eres su hermana...

—Sí, pero si se está comportando cómo un patán ante algo cómo esto... creeme que lo pondré en su lugar aunque sea mi hermano.

Zoe negó mientras más lágrimas salían de sus ojos.

—No Ro... no quiero que discutan, no sé porque dijo eso; dice que hace mucho no me toca. —murmuró la rubia— Yo te juro, Ronnie, qué no lo he engañado... lo amo... te lo juro

—Lo sé. Tranquila, Zoe. —murmuró Ronnie abrazando a la chica.— ¿Estás completamente segura de estar embarazada?, es decir, no estoy justificando a mi hermano pero, si lo estamos juzgando o algo por el estilo, por lo menos debemos tener razones claras.

—Bueno... yo... no me he hecho una prueba —confesó Zoe— Hace dos semanas me debió venir mi período.

Ronnie suspiró y se levantó para tomar su bolso y sacar su celular.

—Está bien, mira... puedes quedarte aquí, ¿Okay?. Llamaré a Adam para ver cómo está y mañana tú y yo iremos a comprar una de esas pruebas... así saldremos de dudas.

—Gracias Ronnie —exclamó Zoe— Pero por favor, no le llames... mejor dile a Derek que él lo haga, por favor.

Ronnie vio la desesperación en los ojos de su amiga y asintió.

—Está bien, pero tú vete a dormir, debes descansar. —pidió Ronnie— Ve, te subiré un té en cuánto terminé de hablar con Derek.

Zoe se levantó yendo hacia la segunda habitación del departamento.

—Gracias, Ro —agradeció antes de meterse a la habitación y cerrar la puerta.

Ronnie marcó el número de Derek, el chico contestó al segundo timbre.

—Amor... ¿Qué sucede?, ¿llegaste bien?  —preguntó con tono cariñoso.

—Sí, estoy bien—Ronnie asintió aunque él no la veía.

—¿Entonces?... ¡ya sé!, quieres que vaya contigo y así dormimos juntitos. —Ronnie rió.

—No, es qué... cuándo llegué encontré a Zoe en la puerta de mi departamento. Dice que discutió con Adam y... —suspiró— Cree estar embarazada, se lo dijo a mi hermano y él no lo tomó bien a la primera.