cap 11

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Era una mañana tranquila, pero para mala suerte del bicolor su amado esposo tubo que salir a arreglar algunas cosas.

Era ya tarde y por desvelarse viendo películas asta las cinco de la mañana, fue un fastidio abrir lo ojos y ver el fastidioso sol que entraba por el gran ventanal frente suyo.

_ Hoy es su aniversario 10, creo que si quiere estar listo para cuando el jefe llege tiene que irse preparando para estar presentable, ya que no tarda en llegar _ aconsejo su sirviente personal, viendo el reloj en su mano y contando 5 segundos exactos, antes de su amo ver al calendario en la pared.

_ Lo ovide _ confeso el bicolor en pánico, era 11 de febrero, el reloj marcaba las 12 y aun estaba en fachas, con babas acudiendo de la comisura de sus labios y sus ojos dilatados por estar aún adormilado, su cabello bicolores atados por una liga estaban echo desastre y su esposo no tardaba en llegar, pues era un día especial y selebrarian el resto del día juntos _ tengo que apresurarme, prepárame un cafe bien cargado y traerlo en cuanto lo tengas.

_ si jefe _ respondio el sirviente antes de marcharse y seguir las indicaciones dadas.

Mientras el bicolor corría asta su closet y buscaba lo que oculto en uno de sus muchos armarios con ropa, buscando asta el fondo, donde oculto tres bolsas de compras.

La primera con ropa para la fecha especial y la otra igual con ropa pero más presumible para la noche, para la última y más especial, ser un regalo que consiguio con mucho esfuerzo para su amado esposo.

Alcanzó a darse un baño y tomarse el tiempo para unos pequeños retoques, peinar su cabello ya algo largo, perfiral sus cejas y dejar su rostro libre de bello no deseado, pues no le gustaba la idea de parecerse a su padre, por lo cual quedarse la barba no era opción ni ahora, ni nunca, era como un trauma extraño con ver pelo crecer sobre su boca.

_ ¿ Porqué eres tan apuesto ? Acaso eres un angel que callo del cielo _ pregunto izuku llegando por la espalda y abrazando a su amado mientras terminaba de retocar un poco su rostro, algo que no veía necesario por el echo de que shouto ya era hermoso sin usar nada sobre su rostro, pero apreciaba que shouto se esforzará tanto por el.

Shouto quien se fue tomado por sorpesa, se sonrojo al escuchar la voz de su esposo tan serca de si, amaba su carácter y lo espantanio que llegaba a ser, por lo cual las sonrisas bobas nunca de acabarían mientras su amado esposo sea así de impredecible.

_ No soy ningún ángel, pero si mi amorcito me dice que lo soy, puedo ser tu ángel _ contesto shouto usando algo de labial rojo, con el cual dejo una clara marca de beso en el cuello de su amado.

Su ropa era un tanto elegante, la cual resaltaba su cuerpo curbilineo y aparte iba a juego con el traje que antes preparo para su amado, colores a juego y asta detalles por igual, solo faltando un pequeño detalle.

_ Cariño, te tengo una sorpresa por nuestro aniversario, pero tienes que ser paciente y esperar _ dijo shouto cambiando de lugares y cuando izuku accedió a esperar con la mirada en el suelo, corrio asta donde oculto de vuelta su regalo.

Regresando con la bolsa ahora decorada con un lindo papel color verde pastel y una pequeña nota escrita a mano por shouto.

_ Yo siempre soy el primero en dar el regalo de aniversario, pero esta vez tu ganas _ dijo izuku emocionado como la primera vez que festejaron su aniversario de casados.

Abriendo con cuidado la bolsa y con delicadeza, pero impaciencia, busco el regalo que ni más, ni menos, que esa misma joya que en su momento su difunta madre le entregó cuando era solo un niño.

_ Lo e buscado durante años y se que la pieza original ya no existe, pero mande a replicar una, no es igual, pero ahora tienes algo que te recordará a tu madre _ explico shouto, pronto ciendo abrazado y levantado, por el emocional izuku, quien adoraba el regalo y eso era seguro por su hermosa mirada llena de amor.

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