Agápē

Capitulo 12

A la mañana siguiente me levanté ya que sentí como Simon hablaba con alguien, así que abrí mis ojos lentamente para poder acostumbrarme a la luz del sol y me di vuelta en la cama para verlo sentado en una silla con su teléfono sostenido en un escritorio mientras hablaba con Alan por una videollamada

El estaba vestido con unos pants negros de algodón y sin su camisa mostrando su cuerpo perfectamente trabajado, él estaba sin su pasamontañas. Cuando hablaba con su hijo o solamente estábamos los dos solos él no se ponía pasamontañas

Esperé pacientemente a que finalizara su llamada y acto seguido el volteó su silla para verme acostada en la cama, palmeó su regazo indicando que me sentara allí y yo bien obediente fuí hacia él

Me sentó en sus piernas y puso ambas manos en mi cintura y habló

- Como dormiste - Dijo dándome un beso

- Muy bien, ¿Y tú?

- Excelente, quiero seguir durmiendo y despertando contigo por el resto de mi vida

Yo reí al igual que él

- Bueno, no te lo impide nada

- Hay algo que sí

- ¿Que cosa? - Dije curiosa

- Que no puedes dormir con esa ropa

Yo llevaba puesta una camisa de Simon negra la cuál me quedaba muy grande y debajo solo tenía mi ropa interior del mismo color que su camisa

- Que tiene de malo mi ropa - Le acaricié sus cabellos rubios

🔞🔞

- Que no voy a querer dormir, voy a querer cojerte toda la noche - Apretó su agarre en mi cintura

- No es molestia para mí - Dije para provocarlo

A él se le dilataron las pupilas y me dió un beso algo largo, mientras me besaba una de sus manos viajó por mi figura y luego subió por el mismo camino pero por debajo de la camisa que yo tenía

- Simon - Dije entre besos al sentir como agarraba mi trasero

- ¿Que? - preguntó cómo si no estuviera haciendo nada malo

El me giró sentandome mejor en su regazo con mis piernas a los costados de su cadera y empezó a besarme de una manera más profunda mientras me presionaba más a su miembro el cuál ya estaba erecto

Él empezó a frotar mi intimidad con la suya un poco desesperado y comenzó a soltar pequeños y roncos quejidos de placer

- Eres tan linda

El besaba mi cuello con desespero

- Me encantas tanto

Me levantó y me llevó cargada hacia la cama donde me tiró suavemente y se colocó sobre mí

- Me encanta todo de ti

A todo ésto yo no decía nada, pues solo disfrutaba de su tacto y sus palabras

Me volteo y tomó mis piernas abriéndolas para tener acceso a mí

Empezó a frotar mi intimidad sobre mi ropa interior mientras decía cosas obscenas a mi oído

- ¿Te excita que tú teniente te toque así?

- Mmhm... S-si...

- Fantaseas todo el tiempo con que te coja ¿Verdad?

- N-no...

- Si que lo haces. Siempre que estoy sin camisa veo como aprietas tus lindas piernas

Deslizó dos de sus dedos dentro de mí con facilidad