¿Dónde Está Mi Chico Cliché?

22. "Lily ¿Aquella no es tu madre?"

Retoco mi labial el cual se quedó todo en la taza de té, y salgo del baño respirando el aire frio que entra por la ventana.

¡Allá voy! Si señor, mi madre podrá haber criado una perra débil, pero no una cobarde.

Abro la puerta y me asusto al ver a Nereo.

— ¡Mierda!

— Sorpresa — sonríe penetrándome con su mirada.

Ojalá otra cosa también, amén. 

Estaba bromeando ok, hoy estoy en mi faceta más graciosa, y puede ser también que mi cuerpo esta ovulando y me altera las hormonas.

Su cuerpo bloquea todo el camino así que me recuesto sobre la puerta y lo miro sin descaro alguno, su atractivo masculino es hipnotizante.

GRR, me siento como una leona (soy un gatito).

— Lily, eres muy fácil de leer, y aun así me dijiste no estar nerviosa mientras temblabas— su tono sexy de reproche me hace sentir pequeña.

Mi corazón se está acelerando y toda fuerza que cogí en la llamada se esfumo. Estoy en problemas.

— Yo, eh, yo— las palabras se detienen y me congelo ante su mirada.

Su mano llega a mi rostro ocasionándome un jadeo por lo fría que se encuentra. Su pulgar sube y baja lentamente por mi piel que ya se encuentra erizada.

¿Es normal que su solo toque en mi mentón me ponga la piel de gallina? Llegan sensaciones nuevas que me hacen querer suspirar solo con su toque.

— Desde que te vi estoy tentado a besarte— susurra un poco ronco.

Por alguna extraña razón quiero sentirlo un poco más cerca. No, no, no, ¿Zeus qué está pasando por mi mente? Eso es una perdedera de tiempo, mejor ponte a aprender inglés, me regaño mentalmente.

Suspiro y me atrevo a subir mi mano hasta su rostro, observo sus labios y los toco con mi pulgar mientras mi otra mano llega a la parte trasera de su cabello.

Respiro con dificultad y vuelvo a enfrentar su mirada con la petición en mis labios. En tik tok aprendí que al tocar su parte trasera de la cabeza mientras estás cerca de un chico los enloquece, y si se busca tener control, el toque en la nuca es el ideal.

— Entonces hazlo... Bésame.

Susurro acariciando su nuca. Nereo atraviesa su mirada en la mía y poza su mano en mi cintura acercándome más a él. Empiezo a sentirme temblorosa ante la sensación.

— No sería caballeroso de mi parte hacerlo, no después de expresarte que lo haría al tener el privilegio, cuando sea tu pareja.

Y mentiría si no digo que eso encendió mi chispa, y al mismo tiempo me dejo sorprendida. Leí esa parte de la carta varias veces para estar segura.

Acerco mi rostro, si él no puede, yo lo haré.

OH MY GOD, esta Lily me agrada, así se hace leona. Si un chico no te da lo que buscas, hazlo tu, y solo aplica en casos donde sea cien porciento correspondido y en confianza, en otro caso busca lo que no te dan, pero en otro.

Sus ojos me hipnotizan por completo y cierro mis ojos dirigiendo mis labios sobre los suyos, el corazón me late fuerte pero lo ignoro, su mano fuerte en mi cintura y su respiración agitada me derrite.

Todo deseo es interrumpido cuando toses me hacen girar al inicio de las escaleras.

Mierda ¿No podía llegar tres minutos después?