Chifuyu odia a Baji. Eso dice él, eso dice Baji.
Baji ama molestar a Chifuyu. Eso dice él, eso dice Chifuyu.
@Los personajes no me pertenecen sino a Ken.
@Historia totalmente original y se niega su adaptación.
@MPREG (hombres que se pueden embaraz...
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Capítulo 18.
La hora tan ansiada por todos había llegado.
Según Seishu, en menos de diez minutos llegarían los tres faltantes de Bonten: Kakucho, Izana y Baji. Todos habían acordado dejar a Baji y Chifuyu solos, e incluso se ofrecieron a llevarse a Kasuki, sin embargo, Chifuyu insistió en que dejarán a su hijo con él; no es que tuviera miedo de Baji, sólo...se sentía más tranquilo teniendo a su hijo con él.
—Bueno, estaremos afuera, grita si nos necesitas.
—¡Sanzu!
—¿Qué? Baji va armado —se excusa el chico.
—Suficiente, pero sí, estaremos afuera por cualquier cosa —termina de decir Shin.
—Escuchen todos, debemos recibirlos afuera, ya están a punto de llegar —anuncia Inuipi —, Izana probablemente llegue molesto por el viaje, así que tenemos que hacer que lo primero que vea sea a su hijo. ¿Listos? — Los presentes asintieron ante las instrucciones — Andando.
Todos, sin excepción salieron de la casa, no sin antes dirigirle una sonrisa de burla al rubio que cargaba a su pequeño bebé. Probablemente le daban su pésame por cualquier cosa que pudiera pasar. Chifuyu se encontraba demasiado nervioso, a pesar de que les había dicho a los demás que no lo estaba para nada, no por la reacción que pudiera tener Keisuke, sino por el simple hecho de volver a verlo.
El sonido tan frenético del auto o camioneta en la que venían se escuchó afuera, Matsuno tuvo que tomar asiento porque sus piernas comenzaron a temblar.
—¿Qué hacen todos afuera? —reconoció la voz de Izana —Oh mi bebé, ¿cómo se portó mi lunita?
—Bien mamá.
—Hey, ¿qué hacen todos aquí? —ahora fue Kakucho quien preguntó —¿Tanto nos extrañaron?
—Claro, los extrañamos mucho —podía notar el sarcasmo de Manjiro. —¡Oye Baji, ¿por qué no entras?!
—No me digas qué hacer.
Escuchar su voz le removió el corazón, sintió un calor en todo su cuerpo y sus ojos comenzaron a picar, ¿realmente era buena idea presentarse así, como si nada? "Hola he vuelto y mira, tenemos un bebé, ¿me aceptas de nuevo?" Sonaba demasiado...cruel.
—¿Estoy haciendo lo correcto? —Se pregunta así mismo. ¿De qué otra forma le podría haber dicho? O vuelto. Ninguna idea en su cabeza era buena ahora mismo.
Suspiro pesadamente y se puso de pie.
—Todo esto me parece muy sospechoso —vuelve a hablar el pelinegro —pero no me importa, estoy cansado, solo quiero dormir y no despertar.
