✦ 𝗧𝗔𝗘𝗚𝗬𝗨❕.ਏਓ ֪ ﹙ʜᴀᴘᴘɪʟʏ ᴇᴠᴇʀ ᴀғᴛᴇʀ² ﹚
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❝Tras lograr su completa libertad, el
príncipe Beomgyu fue fuertemente
golpeado por la realidad, dándose
cuenta de que la vida fuera de la
torre no era...
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Soobin se encontraba tan nervioso que no pudo parar de morderse las uñas hasta que notó el metálico sabor de la sangre en su boca, momento en el cuál se percató de que se había hecho daño en el dedo.
Poco le importó porque cambió de mano para seguir aliviando su inquietud mediante mordidas.
━Te vas a quedar sin dedos ━se escuchó la voz baja de Yuna proveniente de su libro. Como su autor se encontraba en medio de una clase, no quiso alzar la voz, así que se abrió frente a él para mostrarle exactamente las palabras que acababa de decir al notar que no la había escuchado.
Soobin lo leyó y, molesto, agarró su pluma para escribir: "No hablo con traidoras".
El libro de Yuna se cerró de repente, haciendo que se sobresaltara. Rápidamente, se volvió a abrir, esta vez batiendo las páginas con rudeza hasta detenerse en una donde la protagonista del libro pudo seguir conversando con él.
"Lo hice por tu bien" expresó con las palabras en negrita y una fuente bastante ruda. Soobin sabía que cuando Yuna le muestra texto así es porque se siente ofendida.
"¿Por mi bien es hacerle saber a Viken que yo soy Soule? ¡Se supone que debía ser un secreto que me llevaría a la tumba!" respondió debajo.
"Necesitas hacer amigos que no sean creaciones tuyas y Viken es una muy buena opción porque podrías tener a alguien con quien hablar de tus libros" argumentó Yuna. Esta vez su letra se ve más suave.
Soobin releyó su respuesta varias veces porque no había considerado esa opción. Ciertamente, es un tipo bastante solitario cuyo oficio como escritor es algo que solo Yeonjun conoce, pero este no sabe leer y es su mayor inspiración, así que apenas podía hablar con él de sus obras por pura vergüenza.
Desde que decidió dejarlo con su vida, no ha tenido a nadie con quien hablar además de Yuna y Toto, pero este último es una historia defectuosa que solo sirve para entretener, no tanto para mantener conversaciones razonables.
Yuna es tan independiente y racional como un ser humano normal que hasta ella ha podido iniciar su carrera como escritora a pesar de ser un libro. Le hubiera gustado que su poder le permitiera darle una forma física para que su existencia no dependa de su maná ni se vea limitada por un puñado de letras, pues no niega que extraña lo que es sentir la compañía de una entidad humana.
Entonces, pasó las páginas de Yuna en búsqueda de la carta de Viken que se resguardaba entre ellas para leerla de nuevo.
Sus palabras parecen ser honestas y el chico expresó apoyarlo en todo, además de que sabe lo qué son los familiares y, al igual que él, tiene interés romántico por uno.
Quizás mintió cuando le preguntó sobre ello por miedo. Tal vez su compañero pelinegro sí sea un familiar y simplemente lo está protegiendo, pues está prohibido que estos estudien en la academia por cuestiones de seguridad. Si eso es cierto, se siente bastante aliviado, no solo porque ambos tienen secretos muy importantes que ocultar, sino que Viken y su compañero pueden compartir su repudio hacia la gente que maltrata a los familiares, como los bastardos que acabaron con toda la aldea de Yeonjun mucho antes de que este terminara en manos del príncipe Kai.