𝔉𝔞𝔩𝔩𝔢𝔫 (our destiny side story)

FINAL

―¡¡Papá!! ― gritó Emma al ver llegar a Katsuki y a Shoto a la casa ― ¿Dónde estaban? ― la pequeña se aferró a la pierna de su papá Katsuki y sollozó ― el tío Izuku está en la habitación de Yoichi...

―Papá Shoto no se siente muy bien así que va a la habitación a dormir, no lo molesten... por favor ― murmuró Katsuki a la pequeña y ella asintió arrugando la nariz por el olor a alcohol que desprendía su papá.

**

A la mañana siguiente, Shoto despertó con un dolor agudo en la cabeza. Abriendo los ojos despacio se acostumbró a la luz de la habitación y se sentó en la cama.

―Despertaste ― murmuró Katsuki sentado en la orilla con un cigarro en la mano ― es pasado medio día, Izuku está cuidando a los niños y Aizawa está viendo el tema del divorcio...

―No me puedes hacer esto, Katsuki ― susurró con tristeza ― te amo, Katsuki ― fue hasta él y tomó sus manos besándolas ― por favor no me hagas esto...

Katsuki lo miró sin emoción y suspiró apagando el cigarro. Se levantó y salió de la habitación hacia la cocina.

―Katsuki, por favor ― Shoto se bajó de la cama y caminó pisándole los talones al chico, recorrieron toda la casa hasta que Shoto acorraló a Katsuki en la pared ― mírame, Kats...

―Te odio, Shoto ― murmuró con lágrimas en los ojos ― te odio tanto por hacerme tener una puta familia contigo y marcarme, porque sí, soy omega y la puta marca no es temporal. Te odio tanto que solo espero que nunca más veas a tus hijos...

―Katsuki... ― susurró con los ojos cargados en lágrimas.

―¿Vas a llorar? ― sonrió y negó ― no se por que espero cosas distintas de ti, Shoto. Te victimizas siempre y eso no va conmigo ― el alfa intentó tocar al cenizo, pero este le gruñó apartando las manos ― no me toques, maldito alfa. Me iré con Toya y los niños apenas el divorcio esté firmado, el departamento es tuyo para que hagas lo que se te de la puta gana.

―¿Qué planeas con todo esto? ― se acercó al omega y sonrió ― ¿hacerme sufrir?

―Llevamos casi seis años de casados, Shoto. El sufrimiento no es algo que tu tengas en tu cabeza, siempre te han dado todo en bandeja de oro y por eso me engañaste, ¿no?

―No sabes nada, omega ― gruñó con molestia ― no sabes absolutamente nada ― golpeó la pared a su lado y respiró grueso ― fue un error haberme casado contigo...

―Lo mismo digo, Todoroki-san ― el cenizo lo miró a los ojos y suspiró ― me voy a buscar los papeles y buscar departamentos para mi nueva familia ― caminó hasta la puerta y suspiró sintiendo como su alfa se deshacía en agonía ― no es tu puto problema, Katsuki ― murmuró al salir cuando el viento frío le golpeó la cara ― ya estamos en invierno... ― miró el cielo y sonrió ― es tiempo de cambios...

Caminó por la calle solitaria y sonrió cuando empezó a nevar. Se sentía de nuevo como un niño pequeño jugando en la nieve.

El auto no vio a Katsuki y Katsuki estaba muy concentrado en sentirse bien que no escuchó la bocina y el impacto fue tan fuerte que salió disparado metros lejos. Las personas llamaron a la ambulancia y se llevaron el cuerpo inerte de Katsuki que portaba una sonrisa mientras veía la nieve caer en Musutafu.

**

El funeral fue dos días después del accidente y que los médicos dijeron que no había nada más que hacer, Todoroki Katsuki estaba muerto.

Las personas lloraron y se despidieron del chico de llamas. Toya lloró como nunca mientras sujetaba la mano de Emma. Shoto no se presentó al funeral, ni al velorio, ni a ninguna ceremonia. Estaba tan agotado mentalmente que no quería saber nada de Katsuki, lo odió por mucho tiempo e incluso dejó a sus hijos a Toya, eso era lo que Katsuki querría.

―¿Dónde está mi papá? ― le preguntó Emma una noche a Toya mientras él intentaba criar a sus hijos.

―¿Shoto? ― Emma asintió ― creo que está deprimido, Emma ― acarició sus cabellos y suspiró.

―¿Cómo estás tú? ― murmuró abrazándolo ― se que ha sido difícil para ti, eran muy amigos ¿no?

Toya sonrió y asintió.

―Si, éramos muy amigos ― suspiró y miró el techo ― no lo sé, cada día duele menos creo. A Katsuki no le hubiera gustado que me deprimiera o cosas así, le hubiera gustado que fuera feliz y creara una familia con alguien más.

―¿Por qué no lo haces? ― preguntó Emma somnolienta.

―Por que los tengo a ustedes, y Shoto dudo que tenga la capacidad de cuidar niños ahora.

―Gracias, Toya ― susurró Emma quedándose dormida.

―De nada, Emma...

Haré todo para que estés orgulloso de mi, Katsuki