— no era necesario que hagas todo eso - le dije apenas nos vimos a los ojos.
— pero te gusto, o no? - sonrio.
— ves que hablás muchas boludeces - puse mis ojos para arriba.
— no lo negaste, eh - entecerre los ojos.
— callate - le pegue en el hombro.
— que horas son? Sabés? - me pregunto.
Vi mi apple watch.
— las 5:40 de la tarde - lo mire.
— tengo que salir con Lucrecia - dijo arto.
— por qué lo decís con ese tono?
— porque no quiero salir, siempre salimos porque ella quiere y me obliga hasta que le diga que si, yo también me canso - volteo los ojos.
— y bueno, que vas a hacer? Ella es así de intensa cuando le gusta alguien, además no podés retroceder el tiempo como para elegirte por otra chica que no sea MI amiga - recalque "mi"
— no era necesario que lo recalques
— vos solo preocupate en no hacerle daño, no la quiero ver llorar por vos - lo mire con asco.
— no me mires con asco que yo se que te encanto
— somos hermanastro, Iván! - le pegue.
— pero no tenemos la misma sangre en las venas, además yo no te considero hermanastra
— yo tampoco, pero lo somos igual - voltee los ojos.
— no pasa nada si cortamos el "lazo familiar"
— mejor raja de acá y vete con Lucrecia
— si, si, ya me voy, pero una cosa más
— qué?
Se acerco a mi rapido y me beso.
Solo duro unos segundos el beso.
— ahora si, chau - se fue.
Yo me quede parada nalizando todo.
— es un tarado - mire a Linda -. O no, mi amor?
Su silencio lo tome como un si y la cargue.
No fuimos a mi pieza para ver una peli.
Vimos "la vida secreta de las mascotas"
(...)
Me desperte y vi la hora.
Eran las 9:58
Me quede dormida.
No sé si mi madre y Victor llegaron.
La verdad no sé nada.
Yo me levante y deje a Linda dormida.
Fui a la pieza de Iván para ver si estaba.
Y si, si estaba, pero dormido.
— Iván - le susurre en el oído.
Él se removio de la cama.
— oye - lo moví.
— qué? - dijo ronco.
— levantate - lo movi de nuevo.
— no molestes, Emilia, mejor echate conmigo a dormir, dale - palmeo su lado con los ojos cerrados.
— no, Iván, dale, levantate - susurre más alto.
Él me agarro del brazo y me tiro hacia él.
— echate bien y dormí - yo voltee los ojos.
Hice lo que me dijo y de ahí senti que me abrazo.
Puso su cabeza en mi pecho y mi mano en su cabello.
— haceme mimos - ordenó.
Le hice mimos hasta que me dormí de vuelta con Iván.
