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——Que tal si, si su idea si funciona?——Dijiste mientras estabas sentada en el balcón del tercer piso de la casa, admirando la llegada de la puesta del sol, haciendose los tonos mas anaranjados y rojizos
——No caigas en su discurso linda——Adam te sorprendio por detrás, sobresaltandote——No es seguro que funcione su puta idea
——Como puedes decirlo con seguridad?
Lo observaste fijamente, pero diste un suspiro enojada, no te gustaba que usara aquella máscara todo el tiempo, te levantaste de tu lugar para ir al sofá y carraspeaste.
——Solo...tendríamos que ver cómo funcionaría la redención, y aplicar lo que dije ayer en la oficina
——Ya te digo yo que no funciona, SON PECADORES, no se les puede dar otra oportunidad, debieron pensarlo mejor antes de cagarla.
Suspiraste pesadamente y fruncíste el ceño.
——Quitate la máscara
Adam se confundió y fruncíste el ceño.
——La usas incluso estando en casa, ya ni siquiera....ni siquiera te reconozco, cambiaste demasiado, no eres el hombre que conoci hace años.
Tu voz sonó quebradiza, en un hilo como si en algún punto se te fuera a quebrar
La máscara de Adam cayó al suelo, la había dejado caer y se acostó encima de ti, quitándote el aire
——Perdoname, _______, necesito protegerte a toda costa, podría simplemente decir que la exterminación se cancele, pero donde se revelen, temo perderte o que si quiera te dañen.
Sentiste un leve peso en tu corazón.
——Tranquilo, quizás sea algo complicado la dichosa redención...
Adam se acercó a tus labios, empezando un tierno beso, acaricio tu mejilla profundizando el beso.
El beso duro unos segundos antes de separarse y mirarse fijamente.
——Eres un tonto
Adam te observo confundido
——Simplemente, no hagas una idiotez, por favor
Lo rodeaste con tus brazos, teniendo un cálido abrazo que no dudo en corresponder
——Prometo no hacer una idiotez, amor.
Ocultaste tu rostro en su pecho, sintiendo su acogedor calor y quedándose Haci hasta quedarse dormidos.
(...)
Las semanas pasaron después de aquel suceso, y el trabajo se habia hecho mas agotador para ti, ahora te encontrabas caminando directo con una de las seraphines para ser exactos, la menor.
