𝟬𝟭| ʀᴇᴇɴᴄᴀʀɴᴀᴄɪᴏ́ɴ

6.3K 833 149
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝓬𝓪𝓹𝓲́𝓽𝓾𝓵𝓸

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

𝓬𝓪𝓹𝓲́𝓽𝓾𝓵𝓸

𝚛𝚎𝚎𝚗𝚌𝚊𝚛𝚗𝚊𝚌𝚒𝚘́𝚗

𝚛𝚎𝚎𝚗𝚌𝚊𝚛𝚗𝚊𝚌𝚒𝚘́𝚗

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡ESCRITOR! ¡DESGRACIADO!.

Grito el chico desde su habitación lanzando su teléfono con furia.

¡Endeavor ya dañó mucho a sus hijos! ¿¡Por qué repites el mismo patrón!?.

No pudo evitar estar furioso al ver el trágico final de aquellos pobres niños a causa de las ambiciones de su padre.

Tampoco pudo evitar soltar algunas lágrimas, al ver el destino de Shoto y Touya. Su futuro ya de por si era trágico, pero la historia que se encontraba leyendo lo sobrepaso.

Yo haria un mejor trabajo. — Murmuró dejando su rostro en el peluche de osito que tenía. — Los cuidaría y amaría tanto como pudiera. Les haría galletas y jugaría con ellos.

Comenzaba a sentirse exhausto, sus ojos empezaban a cerrar lo cual era extraño pues apenas eran las dos de la tarde.

Comenzaba a sentirse exhausto, sus ojos empezaban a cerrar lo cual era extraño pues apenas eran las dos de la tarde

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Despertó en un jadeo notando un cuarto diferente al suyo en tonos blancos y al estilo japonés.

¡¿Japonés!?

Se levantó tan rápido como pudo, el ambiente era distinto y todo se sentía tan irreal. Camino en círculos buscando una respuesta ante tal suceso o bueno, al menos hasta que vio su reflejo.

Ahora era albino, de ojos grises con una marca extraña que cubría la mitad de su cara, vestía un yukata tradicional en tonos azules junto a una sortija de matrimonio.

Ante su repentino cambio de apariencia hizo lo más inteligente que podía hacer en ese momento.

Gritar.

Las puertas fueron abiertas dejando ver a cuatro niños totalmente preocupados por el. Los reconoció de inmediato, eran Touya, Fuyumi, Natsuo y Shoto.

¡Mama! ¡¿estas bien?!. — Pregunto la niña acercándose a él. — ¿Ya te sientes mejor?

"¿Mama?" Se cuestionó a sí mismo, él era hombre antes y ahora, luego recordó un dato sumamente importante.

Era una historia omegaverse, y él era un omega. 

El omega de Enji Todoroki.

Aquel que se suicidó por los maltratos y abusos físicos en el cumpleaños número ocho de Shoto.

Esto no puede estarme pasando. — Murmuró mirando al suelo, sin mas, se dejo caer al suelo asustando a los menores. — Me pasa por imbécil.

¿Mami?. — Se acerca Natsuo junto al pequeño Shoto demasiado preocupados sosteniendo el borde de su yukata.

Estoy bien, lo siento si los asuste. — Dice en pequeñas pausas abrazando a los niños. Touya los mira desde lejos demasiado retraído para tomar la iniciativa.

Sin embargo, la mano de su padre se pone frente a su rostro, sonriéndole de la misma manera que hace años.

Ya estoy aquí, lo siento mucho.

"Me haré cargo de ustedes, ya no están solos"

"Me haré cargo de ustedes, ya no están solos"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No se que hago con mi vida. Pero qué importa cuando eres escritor con problemas mentales.

𝐅𝐀𝐌𝐈𝐋𝐘 𝐉𝐄𝐖𝐄𝐋𝐒 | ғᴀᴍɪʟɪᴀ ᴛᴏᴅᴏʀᴏᴋɪDonde viven las historias. Descúbrelo ahora