QUERÍA UNA HERMANA Y ME TRAJERON UN NOVIO

ZMLM 34.

 "170.7 cm".

Las palabras de Fu Kun hicieron que el corazón de Fu Yijie diera un tranquilo salto, entonces, vino una débil sensación de melancolía y malestar.

Él anhelaba que simplemente fueran como eran; poder aferrarse despreocupadamente a Fu Kun y actuar como un mimado, Fu Kun le abrazaba y le daba algunos besos de improviso, lo llevaba a la espalda y corría por todas partes, pero ahora, todos habían crecido, comparado con Sun Wei y Sun Xiao, que peleaban y amenazaban con romper su hermandad una vez a la semana, que Fu Kun no se impacientara cuando se aferraba a él ya era digno de mención.

Fu Yijie se acostó en el tatami, suspirando, comparado con averiguar qué le pasaba exactamente, le asustaba más que Fu Kun le odiara.

—¡Esta cocina no está nada mal! —Fu Kun gritó en la sala de estar, la cocina y el baño privados le hicieron muy feliz, dio unas cuantas vueltas, escudriñando el lugar.

Su padre puso la casa de Diu-diu en el pequeño pasillo de la entrada de la cocina, Fu Kun ni siquiera dejó pasar la casa de Diu-diu, se acostó en el suelo, mirando fijamente a Diu-diu, que estaba acurrucado en su casa: —¿Te sientes bien? Nos hemos mudado y ahora hasta tu casa es más grande.

Fu Yijie miró el nuevo dormitorio, realmente era mucho mejor que la pequeña habitación dividida del espacio común mediante una tabla de madera, incluso sin encender la luz, la habitación también era luminosa.

Salió al balcón, desde donde podía ver a lo lejos, la sensación de estar en un punto alto y mirar a lo lejos con el viento soplándole le hizo sentirse mucho más relajado.

No quería separarse del tongzilou por muchas razones, pero el nuevo hogar también le deparaba muchas sorpresas.

Después de la comida, Fu Kun se duchó tres veces, explicando que era para experimentar la potencia de un calentador de agua, tras la ducha, vestido solo con calzoncillos y con gotas de agua aún en la piel, corrió hacia el balcón, el viento le había provocado un buen puñado de estornudos, por lo que regresó a la habitación, agarró la manta y empezó a revolcarse en el tatami.

—¿Podrás dormir con normalidad esta noche? —Fu Yijie estaba un poco preocupado.

—Es difícil de decir—, Fu Kun se envolvió la cabeza con la manta mientras se sentaba con las piernas cruzadas en el tatami—, con este nivel de mejora de nuestra casa, probablemente estaré sobreexcitado durante una semana.

—Entonces dormiré en el suelo esta noche. —Fu Yijie señaló las tablas del suelo de madera junto al tatami.

—¿Tienes miedo de que te dé una patada mientras estás felizmente dormida? —Fu Kun soltó una risita—, ¿qué diferencia hay entre dormir en el tatami y en el suelo? Ambos son planos, puedo rodar hasta debajo de la mesa.

—¡Pues rueda! —Fu Yijie le miró fijamente.

Fu Kun no rodó bajo la mesa durante la noche, pero sí lo hizo fuera del alcance de la manta, para evitar que se resfriara, Fu Yijie solo pudo agarrarse a la manta y seguirle, cuando se levantaron por la mañana, ambos estaban en el suelo.

Nuevo hogar, nueva habitación, había escritorios para cada uno de ellos, una estantería enorme, estas cosas disminuyeron la inquietud que Fu Yijie sentía ante ciertas incertidumbres.

Después de terminar otros libros, todavía sacaba y hojeaba aquellos dos libros que le habían sacudido hasta lo más profundo, antes, se había centrado en ejemplos de la vida real, pero ahora, comenzó a estudiar lentamente la discusión de estas personas escritas en los libros.