QUERÍA UNA HERMANA Y ME TRAJERON UN NOVIO

ZMLM 24.

"¿Eres idiota?".

Después de que Fu Yijie comenzará la última racha de preparativos para los exámenes, puso en pausa sus carreras matutinas, pero normalmente se levantaba antes que Fu Kun. Fu Kun dormía demasiado tarde y se levantaba de la cama como si le estuvieran torturando, mantenía los ojos cerrados cuando se cambiaba de ropa, e incluso se durmió un par de veces mientras se cepillaba los dientes.

Pero cuando Fu Yijie se despertó hoy, Fu Kun no estaba en su cama, sino que había terminado de lavarse y estaba sentado a la mesa esperando el desayuno.

—¿Por qué te levantaste tan temprano? —Fu Yijie lo miró con asombro.

—Me desperté por el calor—, Fu Kun se apoyó en el respaldo de su silla, levantando la vista—, ¿no sentiste calor?

—No sentí mucho—, Fu Yijie se tocó, su piel era bastante suave, y no sudaba—, dormiré en la litera de abajo esta noche entonces.

—Hm.

Fu Yijie tomó su toalla y salió de su apartamento, viendo unos calzoncillos secándose en la puerta, eran de Fu Kun y todavía goteaba agua.

Fu Kun llevaba esto anoche, lo recordaba bien, estos calzoncillos negros tenían la textura más agradable para frotarla.

Cuando volvió después de lavarse, su madre tomó su bolso y estaba a punto de salir.

—Al mediodía voy a casa de la tía Liang por medicinas para tu padre, así que tú y tu hermano pueden comer afuera solos, le he dado el dinero a tu hermano. —Su madre le acarició la cabeza.

—¿Qué le pasó a mi pa? —Fu Yijie se sobresaltó.

—No pasó nada, los conductores de autobús son todos iguales, no se encuentra muy bien del estómago, así que le he dicho a la tía Liang que le dé alguna medicina china.

—Oh. —Fu Yijie asintió.

Su padre no comía a horas fijas, a veces, un viaje le retrasaba, y puede que ni siquiera tuviera tiempo de comer el almuerzo que su madre le enviaba antes de tener que salir para su siguiente turno, así que siempre tenía problemas de estómago.

Fu Kun llevó a Fu Yijie a la escuela, normalmente, lo enviaba más lejos y dejaba bajar a Fu Yijie cuando estaban casi en la puerta de San Xiao, pero hoy, Fu Yijie saltó de la bicicleta cuando apenas habían llegado a la intersección.

—¿Qué pasa? —Fu Kun frenó la bicicleta y le miró.

—Caminaré, mi cuerpo se pone rígido ahora que no corro, déjame hacer un poco de ejercicio. —Fu Yijie caminó, estirando sus brazos y piernas mientras saltaba.

—Espérame cuando terminen tus clases al mediodía, vendré a recogerte. —Fu Kun gritó.

—No es necesario. —Fu Yijie se dio la vuelta y gritó.

—Te llevaré a comer—, Fu Kun pensó un momento y añadió—, habrá una sorpresa.

Fu Yijie no tuvo tiempo de preguntar cuál era la sorpresa antes de que Fu Kun ya hubiera pisado el pedal, con la bicicleta esprintando a gran distancia.

Fu Yijie en realidad no tenía mucho interés en la sorpresa de Fu Kun, fragmentos de cristal de colores recogidos del suelo, una pequeña figura de arcilla de animal hecha con el barro de las obras de construcción, una hoja seca hecha jirones de la que solo quedaban las venas... Todo eso eran sorpresas que Fu Kun le había dado.