Nota de la autora

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It's a damn cold night
Trying to figure out this life
Won't you take me by the hand?
Take me somewhere new
I don't know who you are
But I, I'm with you
I'm with you
I'm with you, Avril Lavigne

Esta historia llegó a mí vida dos años antes de terminar el primer borrador del manuscrito (diciembre de 2023) y, si estás leyendo esto, es porque, finalmente me he atrevido a dejar que una historia mía salga a la luz, lo cual me hace sentirme muy orgullosa de mi esfuerzo y de los personajes que la componen y que me han enseñado tanto a lo largo de la escritura de este libro. 

La primera que vino a mí, queriendo contar su historia y gritándome desde dentro para que la escribiese, fue Lorena, una chica que necesitaba amarse a sí misma antes que al resto y sobre todo, aprender a escuchar sin dejarse llevar por el miedo, una chica que cometía errores que, no solo hacían daño a la gente que quería, sino también a sí misma, una chica llena de inseguridades que tenía que aprender a gestionar, pero buena e incapaz de hacerle daño a nadie adrede. 

Más tarde, fue llegando Raquel, muy poco a poco. Ella no me gritó, no irrumpió en mi cabeza como Lorena, sino que fue llamando a la puerta sutilmente, pero con las mismas ganas de contar algo que la primera. Ella no me pidió contar su propia historia, ella solo buscaba ser la voz de la persona que tanto había querido y que ya no podía pronunciar palabra alguna, ella solo quería hablarme de Cristina, necesitaba darle la voz que aquella chica de sonrisa eterna y ojos verdes como la primavera, había perdido. 

Y es que Cristina es la verdadera protagonista de esta historia, porque todo lo que hizo creyendo que era por el bien de sus seres queridos, sólo puso la vida de éstos patas arriba, dejándoles a cada uno de ellos una herida imborrable e imposible de cerrar. Porque a pesar de que la vida siga y la primavera vuelva a llegar cada año, a Raquel le seguirá doliendo su recuerdo y a Lorena, a pesar de nunca haberla conocido en vida, también le dolerá ver sufrir a una de las personas que más quiere. Pero aun así, seguirán brindándose ese amor y ese apoyo que necesitan. Y es que no hay mejor forma de salir adelante que ayudar, pedir ayuda y dejarse ayudar, confiar en las personas que te quieren y que solo quieren verte bien. No hay mejor medicina que el amor propio y el amor de los que nos  rodean.

Esta historia habría sido muy distinta si Cristina hubiese luchado un poquito más, si hubiese buscado otra solución mejor, porque la había. Quizás Raquel y Lorena no se habrían conocido nunca si nunca hubiese pasado nada de esto, o a lo mejor sí, pero no sé habrían enamorado, o sí. Nadie lo sabe. Lo único seguro es que si Cristina hubiese decidido luchar un poco más, si hubiese decidido vivir, habría ahorrado mucho sufrimiento a los demás. Pero pasó, y aunque ahora ellas hayan aprendido a vivir y a disfrutar de cada momento, seguirá siendo una historia injusta porque Cristina siempre va a merecerse el lugar en el mundo que ya no puede tener, porque solo seguirá existiendo y viviendo en el recuerdo de quienes la quisieron y la querrán hasta el fin de sus días. 

Por último, quiero pedirte a ti, que estás leyendo eso, que si te encuentras mal, pidas toda la ayuda del mundo, la que te mereces y refúgiate en la gente que te quiere. Eres una persona muy válida y especial para quiénes te rodean, así que no les quites el privilegio de estar contigo para apoyarte y ayudarte.

 Eres una persona muy válida y especial para quiénes te rodean, así que no les quites el privilegio de estar contigo para apoyarte y ayudarte

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La primavera que hay en tus ojosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora