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- ¡Él debe morir!

No pudiendo soportar más las barbaries y sin sentidos que estaban soltando en la taberna sobre Wei Wuxian, Lan WangJi no tuvo otra que dejar su bebida sobre la mesa y salir por la puerta directamente a unas de las calles más concurridas del pueblo. 

Hacia ya unos cuantos meses desde que había visto a Wei Wuxian y un par desde que Jiang WanYin había anunciado que Wei Wuxian y él se habían enfrentado en una pelea y ya no formaba parte de su secta, ahora iba por su cuenta.  

A pesar de haberse esforzado en encontralo, su busqueda no sirvió de mucho, a pesar de los muchos cotilleos que circulaban, ninguno era fructifero, solo habladurias, pero ni rastro de él en ninguna parte, ni de el ni de los Wen que rescato. 

O asi habia sido hasta hacia un par de dias. 

Varios rumores similares, y algunas cosas extrañas en la zona, le hacían pensar que estaba tal vez estaba cerca, tal vez podría ver y hablar con Wei Wuxian otra vez. 

El mercado estaba lleno de gente, vendiendo, haciendo intercambios, o simplemente paseando. Lan WangJi paseaba sin fijarse en nada realmente , en nada que no fuera rojo y negro, por supuesto. Cada vez que algo de esos colores eran captados de casualidad por sus ojos, él se paraba y se fijaba en ello. 

Tal vez , por no fijarse realmente fue que no noto al niño iba corriendo por la calle.  

Un niño que en realidad corría directamente hacia él. 

Solo se fijo en el pequeño niño, cuando este se chocó con su pierna y luego la abrazó.

Dos segundo más tarde el niño empezó a llorar llamando la atención de todas las personas cercanas a ellos. 

- Parece que ha regañado al niño

- Deberias cuidar de tu hijo.

- ¿Eres padre primerizo? No pasa nada si no sabes calmarlo.

La gente a su al rededor empezó a acercarse más y más , hasta que se hizo un semi-circulo alrededor de él.

- No lo soy.

Contestó Lan WangJi con voz demasiado baja, haciendo que nadie le prestara verdadera atención a sus palabras. Se sentía avergonzado, sin saber que decir para salir de esa situación, o por lo menos para que el niño dejara de llorar y le soltara la pierna. 


- ¡Lan Zhan!


El grito en medio de la calle llamó la atención de todo el mundo, que inmediatamente se giró a ver quien había sido, nadie lo hizo a la velocidad que lo hizo Lan WangJi. 

Podría reconocer esa voz divertida en cualquier parte, la amaba. 

Tanto tiempo lejos de él, le había enseñado, que no era solo el fruto de sus mayores fantasias, si no que lo amaba, con todo su extraño corazón. 

Tuvo que reprimir la sonrisa que luchaba por salir, mientras, Wei Wuxian se acercaba con un pequeño trote y una sonrisa enorme capaz de iluminar todo el mundo. 


- Vale vale, el padre ya esta aquí, todo el mundo largo.

Dijo Wei Wuxian en cuanto estuvo junto al barullo de gente, se agacho y recogió al niño cargandolo en sus brazos.

La cara de Lan WangJi solo hizo que Wei Wuxian riera con todas sus fuerzas. 

- Tranquilo Lan Zhan, no es mío, solo lo cuido. 

Wei Wuxian volvió a reír, así que Lan WangJi dedujo que el alivio era visible en su semblante. cosa rara, pero Wei Wuxian era bueno en saber que quería o pensaba. 

- ¿Qué haces aquí? 

- Una cacería por aquí cerca. 

El pequeño niño empezó a mover las piernas pidiendo que lo bajaran al suelo, así que Wei Wuxian lo hizo. 

- A-Yuan, no te alejes mucho. Ves a mirar los juguetes de allí.

En cuanto el niño se alejo, Lan WangJi hablo. 

- ¿Estas bien?

- Estoy bien Lan Zhan, o es que no me ves.

Lan WangJI dejó vagar su mirada por la cara, y cuerpo del otro, deteniendose en ciertas zonas que echaba de menos, sus labios, sus manos, su culo y su entrepierna.

- Tal vez no deberías mirarme.

Pretendía ser una broma, pero a Lan Wangji no le hizo ni pizca de gracia, ya le había privado de poder tocarlo, no iba a permitir que tambien le privaran de mirarle. 

- Te ves bien, parece que has... recuperado tu vitalidad.

Wei Wuxian solo torció la boca, no queriendo hacer ningún comentario sobre el tema. 


***

Estaban tan solo empezando a comer cuando Wei Wuxian saco un papel de su túnica que estaba ardiendo y se levanto corriendo. 

- Lo siento Lan Zhan, pero tengo que irme, de verdad lo siento. 

Mientras Wei Wuxian cogía a A-Yuan para salir corriendo , Lan WangJi tambien se puso en pie, dispuesto a seguirle. 

- ¿Todo va bien?

- No lo se ,no lo creo. 

Lan WangJi dejo un par de monedas en la mesa a toda prisa antes de salir por la puerta siguiendo a Wei Wuxian.

Tres calles mas allá del mercado, casi a las afueras del pueblo, Wei Wuxian se dio cuenta de Lan WangJi le estaba siguiendo. 

- No puedes venir. 

- Pero quiero ayudarte.

- No puedes.

- Prometo no decir nada sobre tus practicas o la que pase, solo dejáme ayudarte. 

Fue esa frase final, con un tono de voz suplicante que jamás había escuchado viniendo de Lan Wangji lo que lo impulso a asentir con la cabeza y dejar que le siguiera al boque. 

Según se acercaban Lan Wangji se sentía mas asfixiado, aquella montaña estaba llena de muerte, de energía oscura, resentida. La misma que había sentido la primera que Wei Wuxian volvió de su desaparición. A pesar de la presión en el pecho, Lan WangJi siguió adelante, si Wei Wuxian seguía adelante, el tambien lo haría. 

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⏰ Última actualización: Apr 10 ⏰

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Dolor - WangXianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora