Hasta Que Las Letras Acaben (PROCESÓ)

07 CAPITULO

Elizabeth Blake.

Estar en un auto mo era como esperaba que sería mi día, estar con Axel Baker definitivamente ni siquiera pasaba por mi mente.

Su cabello rubio está hecho un completo desastre y su camisa manga larga abotonada blanca está arrugada. Aún no entiendo cómo llegamos a esto, y porqué solo sé que quiero salir de aquí y lo haré en cuanto él me deje salir, pasó el seguro ya que intenté escapar más de tres veces.

Esto es como una pesadilla, primero me quedo encerrada con él y ahora estoy encerrada en su auto.

—Bien, esto es lo que haremos. -- dice pero no prosigue.

Le hago un gesto para que siga pero al parecer su mente está en blanco.

—para empezar ¿Por qué estoy aquí?— suspiro pesadamente.

—¿Acaso no viste la docena de paparazzi?— dice como si fuera algo obvio.

—no, porque ALGUIEN se encargó de taparme, no logré ver nada. -- blanqueo los ojos— además, los paparazzi te quieren a ti no a mi, dejame salir o gritare que axel baker me ha secuestrado.

Ahora él es que blanquea los ojos.

—también te quieren a ti odiosa, ¿Acaso no ves las noticias?— enarca una ceja.

No veo mi teléfono desde que discutí con mi madre.

—no. ¿Qué pasó?— digo con interés.

—toma— me entrega su teléfono.

Veo todas las fotos y conspiraciones, y el nombre de Jess y el mío en casi todas las noticias.

Esto es una locura.

Me dejó caer en el asiento y suspiro pesadamente.

¿Que estoy pagando para merecer esto?

Esto definitivamente es una pesadilla.

—¿Ahora lo entiendes? Si no venías conmigo te iban a asfixiar con preguntas que no podrías responder, y bueno los chismes…

Oh, me quiero morir.

La vida me trata como si hubiese separado a one direction.

—¿Y qué haremos?— pregunto.

Sus ojos azules conectan con los míos y por lo que veo no tiene ni la menor idea.

—yo creo que deberíamos caminar— propongo.

—¿Caminar? ¿Se te safo un tornillo?— dice como si estuviera loca.

—si, caminar. Solo compra unas gafas, espera. -- busco en mi pequeña cartera— aquí tengo unos. Caminemos, si son buenos paparazzi sabrán cuál es tu auto ¿O no?

Me mira como si fuera una especie de bruja o no lo se.

Observa mis gafas de sol por unos segundos.

—no me gustan— niega.

—¿Deberían gustarte? Vas a escapar en estas circunstancias no deberías estar exigiendo.

Mierda.

—si, pero tú mal gusto es…bueno tienes muy mal gusto solo mira esas gafas.

—silencio— digo mientras observo como un paparazzi entra al estacionamiento.

—¿Ahora me mandas a callar? No aceptas críticas constructivas.

—silencio Axel.

Me vuelvo pequeña en el asiento y cubro mi rostro con mis manos.