Serendipity (Taekook)

14. Calidez.

Jungkook asintió a cada palabra que salía de la boca del apuesto hombre, fingiendo estar interesado pero no podía. Sus ojos y mente estaban enfocados en esos labios carnosos y brillosos por los besos que de habían dado con anterioridad.

"No me estas escuchando" afirmó poco después.

Jungkook se sonrojó al ser descubierto, volteó a ver al otro lado de la ventana y se rió nervioso.

"Claro que sí, o sea... sí".

Y la sonrisa de Taehyung lo derritió.

"¿Entonces que dije?" Preguntó mientras sus codos descansaban en el volante.

"Que empecemos a tutearnos".

"¿Y que opinas?" Preguntó con la voz baja.

"Opino que me bese". Y Jungkook lo tomó por el cuello para estampar sus bocas juntas.

Se sentía necesitado, hacía mucho tiempo que no lo veía y sumado a su estrés, la dopamina en su sistema lo hizo adicto. Sintió la lengua de Taehyung ingresar en su boca y jadeó, su cuerpo empezaba a acalorarse y a pesar de las alertas que sonaron en su cabeza no se detuvo.

De un momento a otro ya estaba sobre los muslos ajenos, tomando el cabello del otro con intención de no alejarse, pero como cualquier mortal se tuvo que separar para poder seguir respirando, aún si sentía que era suficiente con la respiración de Taehyung.

Jadeó y su pecho se alegró de recibir oxígeno, el mayor no estaba mejor, se veía despeinado y con los labios hinchados por los mordisqueos del menor. Ambos estaban enloqueciendo.

"Deberíamos ir por un helado". Dijo después de que ambos se calmaron.

Jungkook quería decirle que no, que quería quedarse toda la tarde en el coche compartiendo saliva pero no, la vergüenza le ganaba.

Asintió mientras se alejaba y después de que volvió a su lugar Tae arrancó el auto, recorriendo las calles de la ciudad mientras escuchaban a Ariana Grande. Jungkook solo tarareaba disfrutando de la voz de su novio, que cantaba hermoso. Cuando llegaron ambos pidieron su sabor favorito y se quedaron en el auto, hablando de todo y nada, disfrutando del momento a solas.

Jungkook recibió un mensaje de su mamá diciendo que regresara antes de la cena, así que con un puchero tuvo que pedirle al mayor que lo llevara a su casa.

Una cuadra antes, Jungkook pidió que parara.

"Me alegró verte, gracias por buscarme".

"Quería hacerlo desde antes pero, entiendo que quieras estar solo para pensar y eso".

Jungkook sonrió, realmente él era encantador y le gustaba demasiado.

"Realmente me gustas", susurró apenado y con el corazón como loco. "Debo irme, gracias por traerme".

Pero antes de poder bajar el pestillo del auto volvió a bloquearse, impidiéndole salir, volteó a ver al otro y vio en su mirada mil y un cosas que hicieron a su corazón revolotear.

"Mierda, en serio me gustas".

Y sus bocas se buscaron con ansia la necesidad de tocarse despertando y aumentando el calor dentro del auto. Jungkook se subió encima de los muslos del otro buscando desesperadamente fundirse entre esos brazos fuertes que lo sostenían como si no quisiera que se fuera. Estaban fuera de si.

Las manos de Tae pronto encontraron satisfacción en la cintura ajena, toqueteandola por encima y animandose a subir y a bajar a su antojo. Y para la poca mente de Jungkook fue suficiente, haciendo que su cuerpo dejara de resistir lo inevitable y mostrara tal cual la naturaleza dictaba.

"Ah, Tae". Gimió complacido.

El mayor simplemente enloqueció. Dejó caer el asiento trasero y de un momento a otro ya estaban semi acostados dentro del reducido espacio aun con las bocas unidas. Jungkook no se resistió. Era la primera vez que perdía por completo la cabeza, pero quería dejarse llevar. Sintió esas manos grandes meterse bajo su camisa y su cuerpo se estremeció por completo. Jadeó y reaccionó moviéndose en busca de fricción.

Sus mejillas ardieron al darse cuenta de lo que hizo y se separó.

"Perdón, yo..." y su boca fue atacada nuevamente.

Gimió excitado, realmente amando lo que estaba pasando. Sus caderas se movían por inercia creando una fricción agradable al que ambos respondieron con jadeos. ¿Realmente iba a pasar? Su mente de pronto se lo preguntó aunque era un poco obvio.

"Te deseo Jungkook" Tae dijo mientras se separaba y dejaba suaves besos por su mandíbula descendiendo por su cuello. "Déjame hacer más".

Y Jungkook supo que él era quien tenía que decidir.

"Hazlo entonces".

Tras la afirmativa, esas manos grandes tomaron su camiseta y se deshicieron de ella. Jungkook se sintió tímido pero no tuvo tiempo de quejarse cuando eso labios bajaron por su pecho hasta llegar a su pezón y atacarlo, haciéndolo gemir de satisfacción. Perdería la cabeza si esa lengua seguía ahí jugando con ellos, así que se separó al sentir su entrepierna húmeda.

"Me encanta tu sabor" su voz ronca lo enamoró.

Jungkook no dijo nada, dejando que el otro hiciera con él lo que quisiera, pues todo se sentía tan maravilloso. Sintió los ágiles dedos empezar a desabrochar su pantalón y pronto su miembro fue expuesto.

"Es tan bonito". Dijo mirándolo fijamente.

"Cállate, por el amor a Dios".

"Eres tan caliente, cielo". Y con un permiso silencioso, se atrevió a tocarlo. "Estás mojado".

"Deja de decir todo eso" Jungkook se moría de vergüenza.

"Me encanta que te pongas así, me encanta todo de ti". Y sus manos pronto empezaron a moverse, tanteando y jugando a su modo, Jungkook se dejó hacer gimiendo y sintiendo que todo le daba vueltas.

Los besos no se hicieron esperar y mientras Taehyung lo masturbaba podía sentir que tocaba el cielo. Se deshizo ahí mismo olvidando donde estaba y dejó que su cuerpo reaccionara naturalmente. Estaba sobre estimulado y sentía el orgasmo cada vez más cerca.

La mano del otro hacía maravillas, moviéndose expertamente sobre su miembro.

"¿Cómo es que sabes hacerlo tan bien?" Dijo entre suspiros.

"Así es como lo hago normalmente, que bueno que te guste".

Y Jungkook no tuvo tiempo de quejarse por su burla cuando el orgasmo lo tomó por sorpresa. Se deshizo en gemidos y lloriqueos hasta que esa sensación abrumadora abandonó su cuerpo. Se dejó caer entre los hombros del mayor, totalmente sudado y satisfecho con todo lo que había pasado.

"¿Te gustó? ¿Estás bien? ¿Te lastimé?" Taehyung lo atacó con preguntas.

Jungkook lo miró a la cara cansado y sonrió.

"Que buena mano tienes" bromeó e hizo sonrojar al otro más de lo que ya estaba.
"Pero tu no lo hiciste". Dijo al sentir un bulto bajo su trasero.

"Eso no importa, debes ir a tu casa ahora. Lamento perder la cordura". Dijo apenado.

"Debemos repetirlo".

Y antes de poder levantarse el pantalón sintió los dedos ajenos tocar su abdomen, levantando el líquido con ellos y llevándolo a su boca.

"Sabes tan bien".

Jungkook sintió la cara arder y quiso separarse nuevamente pero el otro sacó un pañuelo y empezó a limpiar su abdomen.

"Será mejor que te bañes antes de cenar". Le recomendó.

"Eres un tonto".

Y la risita lo hizo darse cuenta de que efectivamente quería estar con él.

"Un tonto por ti".

No había vuelta atrás, estaba empezando a tener sentimientos fuertes por él. Pero en lugar de preocuparse, su corazón latió con calidez.

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