Alcohol

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—¿Puedo? Pregunté, mi madre negó con la cabeza—Pregúntale a tu padre, Samantha. Por mi tienes permiso mientras no hagas nada raro o de lo que te arrepientas—Convéncelo, sabes que yo jamás haría algo malo, son responsable, lo juro.—Hablaré con él, no prometo nada—Besé su mejilla y me abracé a ella, después me di la vuelta y caminé a las escaleras y las subí aceleradamente caminando a la habitación de mi hermana, abrí la puerta de golpe y esta estaba acostada en la cama viendo su celular? Con música extraña de fondo y una cajetilla nueva de cigarrillos tirada en la cama, había uno de estos entre sus dedos, despegó este de sus labios.


—Vero, ¿Quieres ir? Pregunté, ella me vio de reojo, y apagó el cigarro rápidamente, llevó un dedo a sus labios haciéndome guardar silencio—No, no iré. Sabes que me da flojera cuidarte o arreglarme—Gire los ojos y me di la vuelta con la vista al pasillo, cerré la puerta detrás de mi y entré a mi habitación, me dirigí a mi escritorio que tenía una laptop que recibí como regalo por parte de mis padres sobre el.

Llame a Abril y me senté en la silla frente al mueble, subí mis piernas y las rodeé con mis manos para pegarlas a mi pecho.

—Hola tonta. Dijo del otro lado de la línea, reí—Hola, te extraño. Nada es igual sin ti, ¿Cuando llegas?—No seas rara, apenas ayer empezaron las clases. Llegó mañana, hoy es mi último día aquí, que deprimente, ¿No?—Si, yo extraño Miami. murmuré, asintió, aquella tenía el cabello recogido en una coleta alta y desordenada, un traje de baño rosa y delgado y estaba sobre una reposera.

—¿Qué harás hoy? Preguntó—Saldré con Jules a una fiesta, y Félix no me deja en paz, así que también tendré que lidiar con el—Ponme en contexto.

—Bueno, el idiota quiere volver a hacerlo conmigo, pero le dije que lo de nosotros solo era de una vez, después siguió buscándome dos días después de que fueras, mandándome mensajes, como solución lo bloquee y ayer me dijo que necesitaba hablar conmigo, me llevó a la biblioteca y... Me dijo que quería que le hiciera un favor, le respondí que no haría nada raro; terminé consiguiéndole una cita a su amigo con Jules. Él y yo seguimos hablando porqué la idiota de J. Me dijo que si saldría con su amigo, tuve que ir otra vez con Félix y terminamos besándonos—Abril se carcajeo y giró los ojos divertida.

—Eres un tonto.

Recorrí su cuello con las manos y aquel puso sus manos sobre mi cintura, ninguno decía nada, solo nos observábamos y bailamos rozando nuestros cuerpos, jadee cuando acarició mi abdomen, la música era lo único que llenaba el silencio entre nosotros.

—Félix, por favor... Estaba tan ebria y tan emocionada que no podía contenerme, no podría aguantar ni un poco más, aquel sonrió.

—Ayer dijiste que no haríamos nada y ahora me ruegas que te toque—no te estoy rogando, idiota. El día que yo lo haga va a ser porqué tengo un arma apuntándome a la cabeza—Eres muy exagerada para ser tan linda—Ha-ha Que gracioso—Vamos linda, ríete un poco. Tu risa es preciosa y no la usas.

Giré los ojos divertida y la canción acabo sin que ambos nos diéramos cuenta, no dije nada más, pero me quede observando sus ojos cafe oscuro y lo lindos que eran, jamás me di al tiempo de observarlos lentamente, todos y cada uno de sus detalles.

Solo estaba borracha

—¿Puedo besarte? Balbuceó a mi oído.

Your Sweet Kisses| Riverduccion Donde viven las historias. Descúbrelo ahora