Con ocho millones de personas, pero ninguna tan intrépida para sentarse a oler tu caos, coleccionar tus pedazos y armar un carnaval de risas.
Mis llantos siempre los escondía, eran pocas las personas que presenciaban mi desgracia. Aprendí a hacerlo sola, pasar los dedos varias veces para quitar el rastro de mis heridas en forma de agua, dar una sonrisa y levantarme. Es tan desventajoso ser un alma herida, sola y triste en estos tiempos, y aunque a veces sea temporal ,a nadie le gusta la tristeza ,te observan con burla, se alejan, porque las almas rotas succionan y te arrastran a un cuarto asfixiante, en penumbras, donde ellos estuvieron antes. Allí la única salida es una simple puerta abierta ,que cuando corres hacia ella, el piso, las ventanas, el techo, la cama; te aprisionan con fuerza.Es tan difícil ver la luz cuando tus trastornos no se detienen y la sociedad te culpa por ello.
Yo no vivo, yo sobrevivo.
—Nadie que te haga llorar en frente de un extraño y abrazarlo con tanto desespero merece verte haciendo grandes cosas. Esa persona no es digna de tu sonrisa cuando estés en la cima.
«Haciendo grandes cosas»
«Grandes cosas»
Owen no sabe absolutamente nada ,ni mucho menos por qué lloro. Papá sí merece "verme sonreír en la cima", trato de convencerme de ello.
Estoy de nuevo pegada a su cuerpo, quizás necesitaba ese abrazo hace mucho y no por ser un extraño lo voy a apartar, parece de un alma genuina y pura como pocas, o simplemente es una excusa para no hacerme cargo de mí misma.
—No digas nada. Déjame curarte momentáneamente. —Su mano derecha traza círculos en mi espalda.
—Oh mira, un Hibiscus.
Sus brazos dejan de agarrar mi cuerpo. Se inclina un poco hacia el costado exterior del pasillo, hacia una planta.
—Para ti. —Coloca una flor roja delante de mí.
Mis ojos han detenido el llanto, estoy más serena.
—Gracias. ¿Cómo la llamaste?
—Hibiscus. Es hermafrodita, ¿Lo sabías?
—Ah, no.
En realidad no tengo idea de qué me está hablando.
—Mira te cuento: «Afrodita tuvo un hijo, lo llamaron "Hermafrodito", porque era la combinación del nombre de su madre con su padre "Hermes", obviamente es producto de una infidelidad, porque como creo que ya sabes Hermes no era esposo de Afrodita. Entonces ella decide dejar a su hijo al cuidado de hadas en el bosque, allí creció.
«Un día él decidió explorar los montes y encontró un lago, se metió desnudo sin saber que una Náyade lo observaba lascivamente, ella quiso acercarse porque estaba enamorada con tan solo verlo, sin embargo, Hermafrodito la rechazó...»
—¿Qué crees que hizo la Náyade? —Pausa la historia para preguntarme.
—¿Lo mató? —Niega. —,¿abusó de él?, ¿lo sumergió?
—¡Lotería! —dice sonriendo, y me hace sonreír también a mí—.«La obsesiva Náyade lo sumergió consigo hasta lo profundo, porque si no era para ella, no era para nadie más. Pidió a los dioses que no los separaran jamás y como siempre los dioses cumpliendo hasta lo mínimo, los fusionaron quedando en un solo cuerpo, un solo cuerpo con dos sexos».
Ha culminado.
—¿Y qué tiene que ver con esta flor? —Le enseño la flor roja.
—Pues que este Hibiscus. —Me quita la flor—.Es hermafrodita. Mira aquí —me indica la parte central de la flor—.Estos son los estambres y este el pistilo.¿ O sea qué?...
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Sin mirar atrás #PGP2024
RomanceÁmbar y Owen eran dos almas hermosamente rotas, ambos parecían poesía frágil y exquisita. Cuando ambos colisionan inicia un viaje sin retorno donde dos seres infinitamente imperfectos consiguen hallar hilo y aguja, sentarse a coser fisuras por fisur...