La soledad de mis letras © [TERMINADO]

EL MALDITO NOMBRE

Santiago.
Tengo un problema
con los hombres que se llaman
de esta manera,
¿acaso tengo tan mala suerte
para que casi todos lo que me gustaran
tuvieran todos el mismo maldito nombre?

Nunca se lo dije a ninguno,
claramente tampoco me iba a humillar de esa manera.
Dos del colegio y uno amigo de amigos.
Todos con el mismo nombre,
pero tan diferentes entre sí que es hasta cómico pensarlo.

No sé si es alguna clase de maldición,
pero no puede haber tanta coincidencia
en que ese maldito nombre me persiga.
¿Acaso en alguna vida pasada le rompí
el corazón a alguien que se llamaba de esa manera?

A uno lo invité a mis quince
y esa misma noche se besó con mi amiga,
no la culpo, ella ni siquiera sabía que me gustaba.

Otro no m
e cae bien la verdad,
a una amiga también le gustaba
pero a diferencia de mi,
si se enteraron de lo que ella sentía por él.
Se burlaban de él porque a ella le gustaba,
desde ese momento me dejo de gustar
porque él también se reía de la bromita colectiva.

El último me cae bien,
fue el primero que me gustó de los tres.
Todo esto fue en jardín, y después
siguió en secundaria, aunque ahí ya no me gustaba, solo compartíamos asiento.
Cada vez que nos encontramos de casualidad,
nos saludamos.
Es realmente un muy buen tipo,
aunque me llama roto en la cara la cartita que le regalé,
pero se la dejo pasar porque a estas alturas
no sé si fue real o me lo inventé.

Nunca más me gustó alguien
con ese nombre,
pero mejor no canto victoria
aunque espero que no suceda otra vez.
Lo que sí es que me enamoré,
no de un Santiago pero si de una mujer.

Parece chiste pero tiene la misma
inicial en su nombre,
algún karma debo estar pagando
porque es inaudito todo este suceso.

El maldito nombre Santiago,
la letra S,
hay algo ahí que no estoy pudiendo ver.

¿Es irónico también admitir ahora
que mi abuelo se llamaba Santiago?
Juro que no miento,
no tengo necesidad de hacerlo.

Espero que este maldito nombre
me deje en paz de una vez por todas,
se mantuvo bastante tranquilo en
todos estos años,
así que esperemos que siga así
por un rato largo.

El maldito nombre de Santiago.
hasta en los libros me llegó a perseguir,
incluso en el mío propio.