SALA 1

3 1 0
                                    

Todos juntos.
En la sala número uno.
Todos tristes, con
lágrimas en sus mejillas.

No puedo hacer esto.
Un nudo se me forma
en mi garganta.
Las lágrimas acumulándose
en mis ojos.
Pero no quiero llorar.
No puedo hacerlo.

Doy un paso atrás.
No puedo respirar.
No puedo entrar a ese lugar.
Todo me asfixia.
Si entro allí estaré perdida.

¿Acaso soy la única
que siente esto?
Como el aire se les va
de los pulmones.

Necesito respirar.
Necesito irme de este lugar,
pero no puedo hacerlo.

Una mano en mi pecho.
Estrujando la prenda de mi cuerpo.
Tres pasos atrás.
Me alejo por ese pasillo,
que conduce hacia la sala número uno.

Me siento en un banco.

No lloro.
No siento.
No respiro.
No hablo.
No puedo hacerlo.

¿Cuánto tiempo ha pasado?
No tengo noción de cómo
los minutos van corriendo.
Siento que esto es eterno.
Mi garganta arde,
por el nudo que sigue allí.

Saco mi teléfono
y comienzo a escribir.
Ideas vienen a mi cabeza,
distrayéndome de este
horrible momento.
No puedo detenerme.

Alguien me habla y
me dice que podemos irnos.
Me levanto.
Camino en dirección contraria
hacia la salida.

Me detengo en la entrada.
Salgo de ese lugar,
en donde se encuentra la
sala número uno.

No veo atrás.
Puedo respirar.
Soy libre.

La soledad de mis letras © [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora