dieciséis

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La semana de la gala nueve les estaba resultando demasiado ajetreada. Lucas tenía que cantar en solitario de nuevo, una canción que a él personalmente le encantaba por lo que estaba bastante cómodo. Naiara, sin embargo, estaba acompañada por Juanjo y debían de cantar una canción que les estaba costando un poco pero la compañía del otro les ayudaba a llevarlo mejor. En cuanto a la relación de ambos, estaban mejor que nunca. Si antes no se separaban, ahora eran dos lapas pegadas todo el día o al menos todo el tiempo que podían. Buscaban cualquier momento por breve que fuera para estar juntos y aprovechar la compañía del otro. 

Cuando acabaron los ensayos individuales de la tarde Naiara fue directa al servicio pero antes de cerrar la puerta, alguien que venía tras ella, la empujó con cuidado arrinconándola contra la pared. Lucas cerró la puerta y mirándola con deseo atrapó sus labios desesperado, deslizó las manos que estaban en su cintura bajo la camiseta de ella, acariciando su espalda y atrayéndola más a su cuerpo. Se separaron unos centímetros y él juntó sus frentes con la respiración agitada. 

—No sabés las ganas que tenía de besar esa boquita hermosa que tenés.

Dijo el uruguayo subiendo las manos a sus pechos apretándolos, provocando un leve gemido por parte de ella. 
Naiara lo miró mordiéndose el labio inferior, sabía que ese gesto a él le enloquecía por lo que enseguida volvió a tener sus labios sobre ella. Se besaban con tantas ganas y desesperación que sentían que iban a desbordarse. Era poco el tiempo que tenían para compartir esos momentos así que cuando podían, intentaban aprovecharlo al máximo. La morena se separó de su boca y se centró en su cuello, donde iba dejando besos húmedos. Lucas no perdía el tiempo y recorría todo su cuerpo con las manos, deteniéndose en las partes que a él más les gustaban y que a ella más satisfacción le producían.

Varios pasos acercándose hacía allí los alertaron, obligándolos a separarse. La morena suspiró molesta provocando la risa de él.
Pese a que sus compañeros estaban al tanto de lo que había entre ellos, intentaban no mostrarse demasiado cariñosos delante de ellos pues todavía era algo a lo que estaban acostumbrándose.

—Por qué tienen que ser tan inoportunos de venir siempre al baño cuando estamos nosotros. —se quejó ella.

—Yo no tengo problema en seguir besándote por mucha gente que entre. —sugirió él mirándola divertido.

—Si claro, también puedes quitarme la ropa y hacerlo aquí mismo ¿no? —dijo sarcástica. 

—No me des ideas. 

La miró con una sonrisa elevando las cejas, pues sabía que iba a recibir una colleja por su parte y así fue. Él carcajeó divertido ante la situación y ella lo fulminó con la mirada pero enseguida comenzó a reírse también.

—No te aguanto. 

—Lo que vos digás. —se acercó a ella y agarrándola de la barbilla dejó un corto beso en sus labios. —Te voy preparando el café ¿vale?

Tras la merienda tocaba el primer pase de micros, donde Lucas no quedó del todo conforme con su presentación, al igual que Naiara y Juanjo, a quienes les estaba costando un poco cogerle el truco a la canción. Al finalizar, Noemí les pidió que permanecieran en la sala pues tenía que contarles algo que les iba a alegrar el día. 

—Como ya os dijo Masi el lunes, vamos a hacer firmas. Y la noticia es que... —hizo una pausa dramática. —¡Serán este sábado! 

Anunció la directora provocando aplausos y ovaciones por parte de los concursantes. 

—Pero eso no es todo. —continuó. —Os voy a decir también con quién y a dónde vais. Ruslana, Bea y Martin firmaran en Madrid. Chiara, Paul y Lucas en Barcelona, y Álvaro, Juanjo y Naiara lo harán en Zaragoza. 

Una vida para amar || LunaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora