El nieto del Santo Emperador es un Nigromante.

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Capítulo 74: 043. El Príncipe Imperial está disfrutando de la caza -1 (Segunda parte)

Ella sintió otra ola de divinidad en ese momento.

No mucho después de eso, se dispararon uno por uno proyectiles hechos de divinidad.

Rayos de luz pura comenzaron a penetrar directamente a través de los animales zombificados. Y luego, la divinidad se extendió rápidamente por los alrededores de los no-muertos penetrados.

Los otros muertos vivientes aún intactos retrocedieron a cierta distancia y vacilaron como si esta divinidad fuera demasiado incómoda para ellos.

Proyectiles hechos de divinidad, que luego disparan desde una distancia increíble.

Alice recordó los incidentes de Ronia de los que escuchó en el palacio imperial.

– Su alteza el Séptimo Príncipe Imperial disparó al Conde Vampiro.

"¿Podría ser... Su alteza?"

Los ojos sorprendidos de Alice se dirigieron hacia el campanario.

**

(TL: en primera persona POV).

"¡Excelente!"

Me quedé realmente sorprendido.

Entonces, ¡este es un rifle mosquete hecho por los enanos!

Todos y cada uno de los disparos se sintieron pesados; Incluso el consumo de divinidad era mucho menor que el del viejo rifle que usaba.

Incluso si redujera deliberadamente la potencia de salida para aumentar el número de rondas que podía disparar, ahora me era posible disparar objetivos a quinientos metros de distancia cuando mi alcance anterior era de sólo unos cuatrocientos metros durante el incidente del Conde Vampiro.

Por supuesto, la potencia de fuego aún era considerable y el retroceso era bastante grande ya que estaba disparando a gran distancia.

Normalmente, ya me habría caído de trasero después de disparar un tiro cada vez. Pero al reforzar mi cuerpo con divinidad, casi no había retroceso del que preocuparse.

Dejé escapar un suspiro en el mosquete con el largo cañón y luego inyecté divinidad en mis ojos para ampliar mi campo de visión.

[Se ha utilizado Aura Divina.]

[El arma se mejorará temporalmente.]

[Tu precisión aumentará. Se otorgará la habilidad 'Penetración'.]

Esas fueron algunas notificaciones agradables.

Esta cosa llamada [Aura Divina] me presentó habilidades que antes no tenía. ¡Lo cual fue realmente genial!

Los animales zombificados podrían haber sido rápidos, pero incluso los soldados regulares podrían lidiar con ellos. El verdadero problema en este momento eran los licántropos dispersos.

Mientras esas cosas estuvieran subyugadas, no debería haber más problemas.

Como estaban escondidos entre los huecos de los edificios, no era tan fácil apuntarles.

Pero si viera solo una pequeña apertura...

Apreté el gatillo sin dudarlo.

La cabeza de un licántropo que se asomaba por la esquina explotó en un desastre sangriento.

Usé su olor a muerte y determiné la ubicación de estos bastardos. Tan pronto como encontré una abertura a través de mi vista reforzada por la divinidad, los disparé sin vacilar.