El nieto del Santo Emperador es un Nigromante.

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Capítulo 126: 069. Ruina antigua -2 (Segunda parte)

Cosas como ésta suceden bastante a menudo en las novelas de fantasía, ¿no? Los humanos que invadieran la guarida del dragón serían devorados por la criatura o terminarían convertidos en trozos de carbón asados.

"E-no debería haber dragones allí. Quiero decir, ¿en qué época estamos viviendo...?

Cuando Hans murmuró eso, miré a Damon en busca de confirmación.

"Es como él dice, mi señor. Nadie ha sido testigo de un dragón vivo en nuestra era actual. Es sólo que se han descubierto varias escamas y huesos de dragones muertos, y eso nos dice que algunos deben estar todavía vivos en alguna parte".

Hans asintió frenéticamente cuando Damon me explicó.

"Un hombre que me vendió la escama de ese dragón dijo esto, señor. Dijo que vio un dragón viviente dentro de las ruinas antiguas. Sin embargo, también hizo algunas afirmaciones extravagantes acerca de que había luchado y herido fatalmente al dragón antes de escapar de las ruinas", habló Hans con una cara llena de confianza. "Pero tal cosa es completamente imposible, señor. ¿Cuántas personas en este mundo son capaces de luchar solas contra un dragón? Honestamente, probablemente consiguió la balanza de un dragón muerto o algo así".

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Contemplé profundamente todo lo que había escuchado hasta ahora mientras miraba a Hans. Para ser sincero, empezaba a sospechar bastante del relato de Hans.

Entonces le pregunté. "Si eso es cierto, ¿por qué ese hombre te contó todo sobre este tesoro en primer lugar?"

"Es porque lo ayudé, ya ves. Más correctamente, ¡en realidad soy el salvador de su vida!

"¿El salvador de su vida?"

Hans asintió animadamente.

Durante uno de sus viajes, se topó con un hombre agachado en medio de un paisaje árido. El hombre estaba sentado allí por cansancio después de vagar demasiado tiempo por el desierto. Al parecer, Hans le dio un poco de agua.

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Como señal de gratitud, el hombre vendió esa escama de dragón a un precio muy barato.

"Por supuesto, ese precio tan barato todavía me costó todos los ahorros de mi vida hasta el momento", bromeó Hans al final.

"Incluso entonces, ¿no fue demasiado fácil? Quiero decir, ese hombre podría haber regresado allí más tarde, ¿verdad?

"Según él, estaba viajando por el mundo para encontrar a su familiar desaparecido, señor. Me dijo que planeaba dejar Aslan pronto y que por lo tanto no tiene tiempo suficiente para regresar a las ruinas".

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Junto con la balanza y las palabras de agradecimiento, el hombre le contó a Hans la ubicación de las antiguas ruinas.

-Es realmente peligroso allí, así que te aconsejo que dejes de pensar en ir allí tú mismo. De hecho, te aconsejo que vendas esta información a un noble por un buen precio y sigas adelante.

Esas fueron las palabras de despedida del hombre misterioso.

Pero ésta era la guarida de un dragón, ¿no?

Aconsejar a Hans que simplemente vendiera la información de un tesoro a otra persona... era una idea tremendamente loca.

Hans decidió arriesgarse porque de todos modos ya había desperdiciado su fortuna. Vendió una parte de las mercancías que le quedaban y contrató a mercenarios para que lo acompañaran.