¿Existen acuerdos dónde las dos partes terminan perdiendo?
Violeta Hódar cree tener la vida controlada; una carrera como A&R exitosa, más dinero del que podría gastar en una vida y ninguna atadura más allá de sexo con el resto de personas.
¿Qué más podía desear?
Sí, una única cosa: convertirse en la dueña de la discográfica de su abuela. Y todo parecía apuntar a que eso estaba a punto de suceder, porque Mónica Feixas quiere retirarse para vivir una jubilación soñada.
Entonces, ¿cuál es el problema?
Que tiene una única condición, y es que su nieta esté casada antes de que el año termine o dejará la empresa en manos de su otro nieto, Paul Thin.
¿Qué hacer cuando estás contra las cuerdas?
Encontrar a la chica que estuvo a punto de atropellarte y recurrir a la única solución que, si puede salir mal, saldrá mal: casarte con una completa desconocida.
