Back To Life |Libro II| Ticci-Toby

Un sentimiento extraño

— Mitchie.

Me volteé. Estaba desayunando sola, eso se debía a que eran como las cuatro de la madrugada y no tenía que hacer. En realidad había tenido una pesadilla y no quería despertar a Sally, por lo que decidí levantarme sin más.

— Qué.

— ¿Podemos hablar? – Preguntó Helen.

— ¿Sobre qué?

— Toby.

— ¿Le dirás que él no es para ella? – Liz apareció de la nada interrumpiendo.

— ¿Te interesa?

— Vamos, Painter, es obvio que tenes un problema con Toby y no quieres que ellos estén juntos.

— Por favor, me vale mierda si terminan juntos. Solo no quiero que ella decida algo que sabe que no terminará bien.

— ¿Por qué crees eso?

— Porque conozco a Rogers y sé que no es bueno para ella.

— ¿Eso crees? ¡¿Quién es bueno para ella según tus términos?!

— Alguien con quien tenga un futuro.

Me levanté del banquillo y caminé hacia él.

— ¿Un futuro? – Gruñí. – Helen, yo no tengo un futuro. Ya no puedo estudiar, no puedo casarme, no puedo tener una pareja, no puedo tener hijos, no puedo permitirme una vida normal. Ese derecho desapareció cuando asesiné a mi primera persona y ya no hay vuelta atrás.

— Mitchie

— "Mitchie" nada, la única persona que siempre me quiso por como soy fue él, ese estúpido asesino siempre me protegió y creyó en mí cuando todos ustedes me criticaron. – Clavé mi cuchillo en el desayunador, cegada por la furia. – No vuelvas a hablar del tema, porque ya sabes mi respuesta.

Bloody Painter

Helen estaba completamente sorprendido ¿Mitchie contestando de esa manera? ¿Tan fría? ¿Tan enojada? ¿Tan... Mitch? Sí, es verdad, él se había sobrepasado y estaba siendo muy controlador pero tenía sus razones, Helen tenía a Mitchie como una amiga y no podía soportar que por culpa de Toby ella se transformara en un ser tan frívolo y malicioso. Tal vez no era culpa del chico de googles y Mitchie había decidido su propio destino pero él sentía que debía echarle la culpa a alguien.

— De una u otra manera, no debería interesarte esa parte de mi vida. Menos en este momento de guerra, concéntrate en entrenar y mejorarte para no perder la cabeza. – Contesté y volví a mi desayuno.