Osadía

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Creí que estaría condenada si hacía lo que deseaba hacer…Pero sabía que aquella oportunidad quizás no se repitiera nunca… Fui egoísta…Ella deseaba a Khan…y yo la deseaba a ella… Y entonces pensé que debería hacerlo antes de que supiera la verdad…Antes de que el raciocinio la convenciera de que Khan era sólo una fantasía, un invento, una necesidad…

Quería besarla…¡Me moría por hacerlo…! Aún sabiendo que quizás en un futuro ella no me perdonara, aunque en un futuro mi alma acabara ardiendo en el Infierno…

Miré su boca, sus labios carnosos parecían llamarme en silencio… Todo estaba preparado…Acerqué mi rostro al suyo y por un segundo respiré de su aliento… La sentí estremecerse…

Y ya no pude contenerme…

Tal y como me lo había imaginado, el primer roce de nuestros labios fue mágico, nunca antes había sentido tanta intensidad… La sentí suspirar y me animé a más… Un miedo visceral comenzó a recorrerme… Miedo a no tener otra oportunidad, miedo a que se arrepintiera, ¡miedo a despertar…!

Y entonces, ante aquel súbito pensamiento, y apenas despegando sus labios de los míos, ella susurró:

—No es un sueño, Khan…

Y ya no pude más…

La besé con tanta pasión que sentí que me costaba respirar… Saboreé sus labios con mi lengua y luego, arrebatada, busqué la suya…y me dejé llevar… Su cuerpo, estremecido, se pegó al mío, fundiéndome en un fuego que jamás había sentido antes…Sentía en mi pecho sus latidos desbocados y con cada latido mi beso se hacía más profundo, más salvaje, hasta que no resistí más y le mordí el labio…

Gimió, un gemido muy suave, casi imperceptible, pero suficiente para arrancarme de ese estado de éxtasis en el que me encontraba…e intenté alejarme…Pero ella solo se aferró más…

— Valió la pena…tanta espera…— me dijo pícara…

Se volvió a acercar a mí, como invitándome a más, pero de pronto, unas sirenas sonaron en el puerto…y fue como si el hechizo se rompiera. Me estremecí, y sentí un poco de vergüenza.

Ella sonrío…

— Está bien, puedo esperar un poco más…

Sintiendo que mi rostro se incendiaba por la timidez, solo alcancé a asentir…

Supe, al llegar a mi catre, que esa noche sería incapaz de dormir… 

El retorno (Girl Love)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora