Solo tú... mi lugar seguro.

Nuevo día

Félix abrió los ojos asustado al escuchar los gemidos de su bebé, lo abrazó en forma defensiva y prendió la luz lo más rápido que el dolor de sus lastimadas costillas dejaban.  Sus ojos no reconocieron el cuarto y luego de unos segundos respiro aliviado al recordar donde se encontraba "No era el antiguo lugar y su bebé estaba fuera de peligro". Sonrió agradecido de ser encontrado por aquellos tres chicos.

Se sentó en la cama y observó por la ventana, se dio cuenta de que estaba recién amaneciendo y estaba nublado. Su bebé chupaba su mano seguramente porque tenía hambre así que lo tomo para prepararlo para un nuevo día. Estaba tan agradecido de que Jae fuera un bebé extremadamente tranquilo, casi nunca lloraba y era muy sano. Eso le hacía las cosas mucho más fáciles.

Después de cambiarlo de pañales y ropa,  fue al baño para asearse. Luego salió al pasillo de la forma más silenciosa que pudo para dirigirse a la cocina y  puso el calentador de agua; recostó a su bebé en el sofá y comenzó a preparar su leche.

- ¿Que haces? - Pregunto Han apareciendo prendiendo las luces con ojos soñolientos.- No te levantes a oscuras, puedes accidentarte.

- Yo... preparaba el biberón a mi bebé - Respondió Félix en voz baja sintiéndose culpable - No quise despertarte.

- No me despertaste, me levanté un poco más temprano para terminar un trabajo- Dijo Han  - Te sentí salir del cuarto, y me preocupé de que te quisieras ir, especialmente con este clima tan húmedo.

Félix  sonrió mientras Han sacaba una taza de café comentando lo inestable del clima y las durezas de ser estudiante en esa época.

- Lo sé, también estudiaba antes de tener a Jae - Comento Félix con una sonrisa melancólica.

Han lo observó y se apoyo en la cocina mirando al bebé.

-  Debe haber sido difícil para ti y tu familia.

Félix afirmó sin agregar  más palabras y evitando su mirada, concentrándose en preparar el biberón. Entonces Han le puso la mano en el hombro y sonrió diciendo.

- Ya estarás mejor... Solo da tu mejor esfuerzo. - Luego le paso un vaso de leche y un sobre - No olvides tomarte el medicamento .

Félix lo hizo mientras Han se llevaba el café al cuarto agregando.

-  En un rato más nos levantaremos y sentirás mucha bulla, somos bastante ruidosos.

Félix sonrió, mientras se acomodaba en el sofá para alimentar a su bebé. Luego de un rato Jae se durmió y él lo acomodo en su canasta mientras comenzaba a preparar el desayuno para todos en forma de agradecimiento.

Sonrió al escuchar las alarmas y luego vio a los chicos saliendo de sus cuartos para entrar a los otros buscando ropa o zapatos entre frases como ¿Quien tiene mi chaleco azul?. No encuentro mis zapatillas ¿Alguien las vio? ¿El bolso negro, alguien lo tiene?

Cuando se dieron cuenta de que Félix estaba en la cocina, bajaron la voz y se acercaron, Félix ya les tenía la mesa servida y los chicos le sonrieron mientras le daban las gracias.

- Un desayuno decente en años... No debiste tomarte tantas molestias... terminaremos secuestrándote - Dijo Seungmin contento saboreando la comida.

Innie y Han afirmaron mientras él sonreía.

- Félix, este día te sugiero que descanses con bebé pan.- Dijo Innie pasándole un móvil.- Mira, aquí están todos nuestros teléfonos, incluido el de Chan. No sé si tú traes el tuyo, pero solo mantente en contacto ¿Ok?

- Si necesitas algo, nos escribes- Agregó Han.

- No puedo abusar de la ayuda que me están dando - Contesto Félix mirando el móvil.

- No salgas del departamento, aún no estas bien- Dijo Han observándolo - Hazlo por la seguridad de Bebé pan.

Félix miró a su bebé y afirmo, ellos tenían razón, estaban en pleno otoño y exponer a su bebé al frío y la lluvia no era bueno. Ya lo había hecho el día anterior cuando se fue del lugar donde estaban y era afortunado de que su bebé no hubiera cogido frío.  Pero, ayer tenía miedo, y había dado el primer paso para salir de aquel toxico lugar. Ya encontraría la forma de agradecer toda la ayuda que le estaban brindando.

- Pero necesito ir por pañales y fórmula para mi bebé. - Recordó de pronto.

- ¿Es muy urgente? - Pregunto Han, al ver que Félix negó agregó - Hazme una lista de lo que necesitas, a medio día tengo unas horas libres e iré a la tienda antes de ir a la cafetería, necesitamos algunas cosas para la despensa.

- Y Ramen - Agrego Seungmin.

Félix fue al cuarto y anotó en un papel lo que necesitaba,  sacó dinero de su billetera volviendo a la  mesa y le paso el dinero a Han.

- Solo necesito eso.

Han afirmo y guardo la lista.  Después de terminar el desayuno, cada uno tomo sus cosas y las dejaron en el lavaplatos.

- Dejen ahí, yo lo limpiare.

Los chicos se miraron y Han afirmo mientras arrastraba al resto consigo.

- Muchas gracias... Bueno, iremos a cepillarnos los dientes y nos iremos.

Después de despedirse de Félix, Innie detuvo a Han en el primer piso.

- ¿Que fue eso de dejar a Félix con las cosas? - Pregunto en voz baja - No podemos abusar de él. Esta herido.

- Escucha - Pidió Han-  Félix, necesita sentir que de alguna manera esta retribuyendo la ayuda que esta recibiendo... Si me encontrará en su situación haría lo mismo.

Innie miro a Seungmin, mientras Han comenzaba a caminar murmurando.

- Olvidé que ustedes nunca han tenido necesidades, solo déjenlo sentirse útil. 

- Que cosas tan duras dices - Comento Seungmin.

Los tres chicos salieron de la casa justo cuando Hyunjin detuvo su auto en la entrada.

- Buenos días - Los saludo -¿Los llevo a alguna parte? 

Innie se subió al auto pidiendo que los acercara a la estación de metro, y los otros dos subieron atrás.

Hyunjin miro fijamente a los chicos por el espejo retrovisor, y luego en un semáforo observo a su hermano. Ninguno se veía lastimado o vendado.

- ¿Pasa algo? - Pregunto Innie mirando a su hermano.

- ¿Que fue lo que paso ayer? - Pregunto Hyunjin.- ¿Alguno esta herido?

Innie lo miro con curiosidad y negó.

- ¿Y para que las vendas y la crema? - Insistió Hyunjin.- Me asustaste... De verdad.

Innie sonrió y le dijo que no se preocupara, que había sido un accidente casero, pero estaba solucionado.  Hyunjin lo miro fijamente mientras estacionaba el auto en la estación de metro y agregaba con seriedad.

- Hoy cuando llegue a casa vas a bajar a hablar conmigo, no me gusta que me ocultes cosas.

Innie se bajo del auto junto con los chicos que lo miraban preocupado.

- No sé si llegue temprano - Dijo Innie asomándose - Chan me invitó  cenar.

Seungmin empujo a Han para que caminara rápidamente hacia el flujo de gente y así evitar escuchar a Hyunjin gritar a su hermano que no tenía permiso para salir a ninguna parte, e Innie los seguía sonriendo mezclándose entre la gente.