Vestido como si fuera uno de esos riquillos que solo piensan en si mismos y en el dinero lo hacía sentir incómodo. Con una camisa de vestir ajustada, dejando ver su diminuta cintura y unos pantalones negros, maquillaje y prendas elegantes, por su mente solo corrió el valor que le podía sacar a esas prendas si las vendía.Fue llevado a otra mansión, esta vez fue en el mismo auto que el Joven Lee y el incómodo silencio lo que hacía era querer tirarse del auto y salir corriendo.
No sabe de su hermano, de Felix o de Jeongin y siente temor que algo le haya pasado a ellos. Minho no quiere darle ninguna información ya que el "se debe merecer las cosas", es como si tuviera que ser un buen perrito y hacerle caso a su dueño.
Así tiene que ser.
Salió de sus pensamientos al llegar al lugar y se bajó del auto junto al Joven Lee. Caminando a su par y sintiendo nervios porque no sabe dónde está o que harán en ese lugar, ¿Y si es aquí donde lo venden?
Se adentraron a la mansión y a solo unos pasos de la entrada fueron recibidos por una joven y linda pareja.
—Seungmin, amor, ¿Podrías llevar al acompañante de Minho a su indicada mesa? - el suave tono de ese hombre hizo que su atención fuera hacia el, parecía alguien dulce y calmado.
Aunque no debería dejarse llevar por las apariencias, si fue comprado por un narcotraficante de seguro todos los que estén en esta casa hacen lo mismo o peor.
—Por aquí - respondió el castaño con una sonrisa.
Jisung solo miró a Minho, esperando que el diera su respuesta para poder irse y cuando obtuvo un "Sí" de respuesta siguió a ese chico de labios bonitos.
Debe dejar de mirar tanto el físico de las personas, debe dejar que aferrarse a querer probar a ese chico. Aunque el siempre fue así, si algo le gusta va tras el, debe mantener la calma y no hacer algo que pudiera enojar al Joven Lee.
Seguía a Seungmin hacia la mesa y juró ver a Felix, igualmente sentado en la mesa en silencio, con una mirada baja, como si fuera ordenado a no mover ni un solo pelo.
—Disculpa, ¿Podría ir hacia ese chico? - preguntó señalando al rubio. —Solo lo saludaré
—Claro, no hay ningún problema - sonrió el castaño. —Su silla y la del Joven Lee están al final de la mesa
—Gracias - sonrió y fue rápidamente hacia Felix. —Lix - llamó al pecoso y este rápidamente levantó su mirada.
—¿Sung? - vió sus ojos llenarse de agua y rápidamente lo abrazó. —Sung tengo miedo, no se que está pasando
—Lo sé, lo sé y lo lamento tanto, todo es mi culpa - alejó al pecoso y suspiró. —No llores Felix, te verán extraño
Felix tomó un tiempo para poder calmarse, no pudo comenzar su trabajo porque de repente habían entrado al camerino y se lo había llevado sin alguna razón, solo escuchó la voz del Señor Kim decir, "Te han comprado."
Estuvo encerrado en una habitación hasta hace unas horas, donde tuvo que dejar que unas chicas lo arreglaran para esta cena tan importante y para su "dueño".
—No puedo decirte todo ahora Lix, pueden escuchar pero solo tienes que mantener la calma y ser fuerte, no intentes desobedecer alguna regla que te hayan puesto
—Es muy confuso Sung, no sé dónde está Jeongin - el moreno suspiró, frustrado por la situación en la que está.
—Yo tampoco se donde está, enserio lamento todo esto pero es mejor esto a que los hubiera dejado solos con Kim y que les toque el pelo. Veré que puedo hacer Lix, pero pase lo que pase..
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Dirty Body
RandomJisung vende su cuerpo para poder mantener a su hermano adolescente y su alcohólico padre y Minho es uno de los narcotraficantes más respetados del país.