Eran casi las 7 de la tarde, Liza estaba con Cléo y yo me estaba arreglando, estaban conmigo en el dormitorio, me puse el vestido y luego terminé de maquillarme, algo muy ligero, nada del otro mundo. Escuchamos la puerta, Liza sonrió y yo negué.
- "Hola..." Dios mío, estaba tan guapa que casi me ahogo en el aire.
¡Hola!" Empecé a reírme de su aspecto, casi ahogándome en nada. - Cálmate, hombre, respira.
- Estás preciosa, ¡vaya, vamos al baile! - La miré con cariño, pero la quería allí mismo. Pronto oí risitas que venían de dentro y Victoria se dio la vuelta.
- Hola mi amor, mamá va a salir un rato y tú te vas a quedar con Liza, ¿vale? - Me acerqué a mi hija y la tomé en mis brazos, besándola, ella soltó una risita y llamó a Heriberto con las manos. - ¿Quieres hablar con él, mi amor?
- ¡Él! - Sonreí y me acerqué a ellos, levanté a Cléo y le di un beso en la frente.
- Hola pequeña, ahora voy a salir con tu mamá, pero te prometo que volveremos más tarde, la traeré sana y salva, ¿vale?
- Estará bien, Liza si necesitas algo llámame, ahora ven aquí jovencita, nada de fiestas con Liza, tienes que dormir.
- ¡Mami! - La oí llamar mamá a Victória, y fue muy reconfortante.
- Liza también tiene mi número, ¡si necesitas algo llámame!
- No te preocupes, estaremos bien, ¡y diviértete! - Dije mirándolos, como diría la señora Sara, esta pareja era la pareja.
Nos despedimos y nos dirigimos al coche, al detenerme para abrirle la puerta le hice una pregunta importante.
- Victoria, sabes que cuando entremos juntos en ese salón, ¡seremos la comidilla de la ciudad! - Le acaricié la mejilla y ella cerró los ojos. - Si no quieres ir, no pasa nada, ¡pero yo quiero estar contigo!
- Lo sé, pueblos pequeños y ciudades, quiero ir, ¡y también quiero estar contigo! - se detuvo y dijo algo sobre preocuparse por mí, por mi bienestar, y me tocó la cara. Me estaba enamorando literalmente de él. - Sé que van a hablar de nosotros, pero Heriberto, no vivimos en una burbuja, hoy vamos a salir, mañana puede ser la cena, y tendremos miradas a nuestro alrededor, como dijo la señora Sara esta tarde, que estaba feliz.
Sonreí y la besé en los labios, un beso corto con ganas de más. La ayudé a subir al coche, me di la vuelta y subí, cerrando la puerta. Sonreí y la miré.
- ¿Quieres ir en tu coche? - Me reí de lo que dijo, sabía que saldría el tema de los coches, sobre todo después de la fiesta en la plaza.
- No, tú me llevas, y sí tengo coche, y sí sé lo que significa, pero también sé que mi hija necesita estar segura. - dije mirándole, que se rió y arrancó el coche. - ¡El tuyo no es diferente!
- Lo sé, a mí también me gusta la seguridad. Pero el tuyo es un todoterreno Volvo.
- Heriberto, por favor, midamos quién puede más... - Me reí y le acaricié la pierna. Sentí que su respiración cambiaba, se volvió intensa, creo que no esperaba que fuera tan atrevida.
Durante los casi 20 minutos de viaje, ella mantuvo su mano en mi muslo todo el tiempo, estaba muy tensa con su mano ahí, pero me encantaba, sentir esos cortos movimientos me estaba volviendo loca. Abrí la puerta y la ayudé a bajar. Victoria me miró de tal manera que no pude resistirme, la besé, un beso con deseo y pasión.
Permanecimos en silencio durante el corto trayecto en coche, mantuve mi mano en su muslo, y a veces lo apretaba ligeramente y lo deslizaba sutilmente, notaba que su respiración cambiaba, y eso me daba ganas, apreté las piernas un par de veces y me sentí excitado por ello. Paró el coche y se acercó a ayudarme a salir, todo un caballero, me encantó su actitud. Cuando salí del coche simplemente me besó, ese beso fue diferente, tenía pasión y un deseo carnal que me hizo gemir entre sus labios.
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Algo Inesperado - Español
FanficTodo puede cambiar en una fracción de segundo, las vidas cambian, ocurren muertes, nacen bebés, todo cambia. Algo inesperado sucede y nos cambia por completo.... Y así es como empieza esta historia...