Ejerciendo movimientos bruscos su alrededor giraba. El piso bajo sus pies se desvanecía en cada paso como líquido, flotando y desplazándose tal cual una pluma lo haría danzando por el aire. No comprendía qué sucedía y el que los objetos se distorsionaran sobre su tacto le asustaba, emergiendo lentamente la paranoia hasta descontrolare por completo. Trataba de contener la compostura, pero en segundos la realidad se desmoronaba.
Elevó los brazos tratando de tocar las paredes, pero estas se alejaban desconfiadas de su presencia, provocando que todo se percibiera amplio, descomunal. El vibrar del ambiente podía degustarlo en su paladar, era inverosímil como podía catar los sonidos del cuarto, sabores que jamás había probado pero de igual manera le aguaban la boca con apetencia.
Su pecho se elevaba agitado y preocupado, era más inmenso que su propio cuerpo, creyendo explotaría sin poder soportarlo. El sudor que comenzaba a emerger de su piel caía chorreante al suelo, creando grandes posas de charco temiendo ahogarse.
La madera de la única silla junto a él gemía constante se contorsionaba tortuosamente, exigiéndole tomara parte de su dolor, egoísta. Tal cual los palos traseros se retorcían, sus huesos imitaban la acción desgarrándole. Quiso acercarse y rogarle se detuviera, pero cayó sobre su espalda espantado cuando con un feroz rugir el asiento bramó un «¡No!» como orden.
La espalda se le arqueó cobrando vida, un grito roturó las cuerdas vocales de su garganta notando como su muñeca se desprendía rasgando todos sus tejidos. Cuantía de sangre salía transformándose en ofidios corpulentos, arrastrándose y escondiéndose a la espera de cualquier ataque.
—¡Basta! —se sacudió en el suelo negando frenéticamente, las lágrimas que brotaban de sus ojos era ácido calcinándolos a fuego lento.
La superficie que le sostenía se trizó hasta quebrantarse en cientos de pedazos, desplomándose a través de una fosa espiral, succionándolo sin dejarle batallar para mantenerse a salvo. Inducido a un tifón de magnitud, de su boca comenzó a expulsar vomito de tonalidad negra y putrefacta.
Cuando todo dejó de girar, notó como yacía adherido al techo de la habitación, su cuerpo había vuelto a la normalidad, pero debajo de él todo se encontraba en llamas, sintiendo como la vivacidad de las llamas abofeteaban su piel, magullándolo. Trató de permanecer inmóvil, de lo contrario caería incinerándose, pero su hálito sobresaltado ocasionaba poco a poco su piel fuera despegándose hasta hacerle colgar de un hilo.
—¡No! —cubrió su rostro al desprenderse.
La Lava le engulló privándole de respirar, alborotando todo su cuerpo para salir a flote, pero una anguila se aferró a su tobillo abatiéndole con enormes descargas eléctricas.
—¿Cuánto tiempo lleva? —Namjoon agudizó la mirada, contemplando atento cada movimiento exagerado por parte de Jimin.
—Cinco horas —Jeongguk se aferró al cuaderno marrón donde escribía cada detalle—. En menos de seis minutos el efecto del LSD llegará a su fin, la cantidad suministrada fue leve.
—¿Cómo le fue?
—Estupendo —nada más que ironía se apreciaba en su tono de voz—. Cuando los efectos comenzaron a germinar, suplicaba le colocaran la cabeza porque se le había desprendido.
—Llevas dos meses en esto, ¿cómo ha ido el progreso?
—Te envié todo documentado para que no me hicieras este tipo de preguntas.
—Quiero escucharlo con tus palabras, sabes que me importa una mierda lo que esté escrito en esos papeles.
—El álter a sido eliminado, me costó, pero las hipnosis fueron efectivas. Su cuerpo parece reaccionar mejor a las descargas eléctricas y hemos pasado a las fases de drogas.
—Cuéntame algo que no sepa, Jeongguk. Esta mierda me la sé de memoria —refutó, metiéndose las manos en los bolsillos.
—Ha olvidado a sus padres —le miró de soslayo, considerando en comentarle que también follaban todas las noches—. Con buenos tratos coopera a la perfección. Hoy daremos el primer paso de crear un nuevo álter, vamos avanzando con rapidez. Si todo resulta como planeé, lo tendremos con nosotros durante esta semana.
Se acercó a la computadora y presionó , dando comienzo al mantra programado para cada sesión donde se le administraba drogas.
Jimin recostado sobre la solides del suelo, respiraba como un pez fuera del agua, sus pupilas dilatadas volvían a la normalidad y su mirada yacía fija en la pared izquierda. Había sido una gran contienda y su mente distorsionada yacía preparada para acoger el mensaje.
«El nuevo orden mundial se encuentra cerca»
«El nuevo orden mundial se encuentra cerca»
«Serás nuestro rey, el líder y soberano de todo territorio adquirido»
«Serás nuestro rey, el líder y soberano de todo territorio adquirido»
«La verdad otorgada será llevada hasta tu muerte»
«La verdad otorgada será llevada hasta tu muerte»
«Emerge de entre la oscuridad y ánete a nosotros, te brindaremos todo el poder que necesites, no temas»
«Emerge de entre la oscuridad y ánete a nosotros, te brindaremos todo el poder que necesites, no temas»
«Libertad y buena vida obtendrás si tomas nuestra mano»
«Libertad y buena vida obtendrás si tomas nuestra mano»
«En algán lugar sobre el arcoíris, se encuentra un mundo feliz»
«En algún lugar sobre el arcoíris, se encuentra un mundo feliz»
«Ven con nosotros, síguenos hasta el mundo feliz, el nuevo orden mundial»
«Ven con nosotros, síguenos hasta el mundo feliz, el nuevo orden mundial»
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#1 CONTROL MENTAL ✿ KOOKMIN
Mystery / ThrillerHistoria Original. Prohibida su copia y adaptación. ☞ Escenas fuertes. ☞ Lenguaje vulgar. ☞ Contenido adulto. ☞ Jeongguk activo. ☞ M-preg. ✘ NO apoyo ni pretendo promover ninguna de las acciones antes nombras. →Leer bajo su responsabilidad y mente m...
