Capitulo 4 - "Sartén me regaña"

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Newt no se había sentado con Thomas por dos razones. La primera: todavía se sentía un poco avergonzado por verlo con la camisa empapada, y la segunda: Alby quería hablar algo importante con él, mientras comían.

Sartén caminó hacia Thomas y se rió.

- ¿Puedes explicarme, shank, por qué he recibido siete kilos de salsa de tomate?

Minho, quién estaba sentado al lado del novicio, miró de Thomas a Sartén y de Sartén a Thomas, con un spaghetti en la boca.

- Yo, esto... no soy bueno para la cultivación - admitió Thomas.

- ¡Y que lo digas! - se rió aún más fuerte y lo golpeó en la espalda con fuerza - Supongo que tendré que cambiar el menú para mañana.

- Buena esa - masculló Thomas, un poco avergonzado.

Además de Minho, estaban en la mesa Chuck y un chico llamado Max, un corredor.

El cocinero se fue y ahí fue cuando el pequeño amigo comenzó a reirse.

- ¡Puré de tomate, larcho! - repitió Chuck - No me la creo.

- Tú trabajo no es mucho mejor, fregón - bromeó Minho.

Todos en la mesa se rieron, menos Chuck que se dedicó a comer para evitar la vergüenza.

Los muchachos del Área continuaron hablando mientras que Thomas miraba hacia el otro lado: a dos mesas de allí se encontraba Newt, quién prestaba con completa atención lo que Alby le decía.

A Thomas le gustaba como se tensaban sus sienes cuando estaba preocupado. O como se revoloteaba el cabello cuando pensaba. O la simple manera en la que miraba: tranquila, calmada.

- ¿Estás escuchando, shank? - le preguntó Max al compañero.

- Yo... yo... esto... em... sí.

- ¿Qué miras? - intentó buscar con su mirada.

Minho había notado que Thomas miraba hacia la mesa de los Encargados:

- Creéme, larcho, estoy pensando lo mismo. - se quejaba- No puedo leerle los labios, de todos modos. ¿Por qué no nos dicen ya mismo que ocurre?

No, no era eso. Minho quería saber que discutían Alby y Newt porque podía ser algo importante. Pero Thomas miraba a Newt solamente porque era bello.

Sin embargo, para esconder sus sentimientos dijo:

- Y que lo digas, hace días que están con el mismo plopus... ¿crees que es importante?

- Lo es, estoy seguro - asintió Minho.

- Yo solo sé que quiero otro plato - se limpió Chuck.

Amor SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora